El poder de hablar varias lenguas

Esther Cepeda,

The Washington Post

CHICAGO – El dominio del inglés continúa aumentando entre los latinos, según un nuevo análisis del Pew Research Center, con una cifra récord de 33,2 millones de hispanos, en Estados Unidos, que hablan ahora inglés adecuadamente. Ese párrafo no trasmite correctamente mi afán y deleite por el hecho de que una organización oficial, que no adhiere a ningún partido, valide lo que he dicho en los últimos 20 años: los hispanos se asimilarán como cualquier otro grupo inmigrante de esta nación. Tarde o temprano, hablarán inglés de la misma manera en que los inmigrantes irlandeses, italianos y alemanes lo hicieron antes de ellos —todos los cuales fueron temidos y discriminados debido a sus idiomas de origen y sus acentos.

Pero la adquisición del inglés es siempre la crítica más fácil aplicada con gran severidad a los inmigrantes (o a cualquiera que parezca serlo): “Aprenda el idioma.”

Hace varios años en el estacionamiento de una biblioteca que había agregado recientemente libros y medios en español para servir a la creciente base de usuarios inmigrantes mexicanos, un señor me dijo, “We no speaky Spanish here. ”Le respondí: “Tengo un título de postgrado y yo no ‘espeaky’ estúpido”. La cara de asombro que puso fue impagable.

Lo que la mayoría de la gente no parece comprender es que los hispanos han progresado en este frente durante décadas. En 2013, informa Pew, los hispanos que hablaban inglés adecuadamente representaban el 68 por ciento de todos los hispanos de 5 y más años, mientras que en 2000 representaban un 59 por ciento.

En 2013, el 34 por ciento de los latinos nacidos en el extranjero, que sumaban 6,5 millones, hablaba inglés adecuadamente,

El bilingüismo es muy, muy importante. Josephine S. Chavez, una lectora de mis columnas, recientemente me escribió señalando algo que a menudo se pierde en la conversación general de la adquisición del inglés. Dijo: “Pienso que estamos dañando nuestra cultura al no enseñar a nuestros hijos y nietos a hablar español. Saber dos lenguas es como tener lo mejor de dos mundos.” No podría estar más de acuerdo.

Debido a las severas complicaciones de mis hijos durante el nacimiento, y algunos inquietantes retrasos de desarrollo, los médicos me aconsejaron utilizar una sola lengua en casa. Eso, y la facilidad de establecer una lengua en una familia en la que el papá no habla español, significa que mis hijos —con gran pesar de mi parte— son monolingües.

Las clases de español y los intentos de inmersión no lograron nada, pero aún sigo pinchándolos cada vez que puedo.