Luis Homero Echeverría

Agencia Reforma

PACHUCA, Hidalgo .- Y en la cuna del futbol ya se mece al mandón del Clausura.

Pachuca destruyó la perfección de las primeras tres jornadas del Monterrey, lo destrozó 3-1 y se trepó al liderato de la competencia al presumir sus 10 unidades de 12 posibles.

Los Tuzos se percataron, después de los primeros 45 minutos de estudio, que el acarreo por el centro, el encare a la línea de tres centrales regios y el cambio de juego en el último tercio del campo era la llave para marear al visitante. Y así, Franco Jara se encargó de arrastrar el balón, Hirving Lozano de quemar el lado derecho de Rayados y Rodolfo Pizarro de subir por derecha y meterse entre los huecos de la zaga regiomontana.

Rayados amenazó en la primera mitad con un disparo de Edwin Cardona que apenas rechazó Óscar Pérez y luego sucumbió ante un mejor despliegue físico de los hidalguenses.

Dos jugadas bastaron para que se cayera el castillo de naipes que había hecho Antonio Mohamed, técnico de Rayados, en sus primeras tres jornadas.

La primera al minuto 57, en el acarreo de Jara que derivó en un penal que el propio Franco convirtió en gol. Y cuatro minutos después, ex tuzo Miguel Herrera Equihua se llevó la segunda amarilla para dejar al Monterrey con 10.

Pachuca “agradeció” el gesto con un brote de goles, uno de Ruben Botta en cambio de juego y definición exacta casi al ángulo y otro de Pizarro dentro del área. El gozo de Pachuca mermó un poco con la roja para Lozano y entonces le bajó a su ritmo. Pero Monterrey ajustó tarde y apenas logró el de la honra gracias a Rogelio Funes Mori.

Rayados se derrumbó en un lapso de 15 minutos y Pachuca demostró que la Liga MX es como un juego de sube y baja. Hoy los Tuzos son los que mandan.