Por Paco Díaz

El compromiso social que tenemos no está limitado a un estatus migratorio, así mismo, la responsabilidad de participar en comunidad no la determina nuestra raza, creencias o preferencias. Tenemos que sentirnos parte de una gran comunidad compuesta de personas con diversos orígenes, lenguajes y culturas, que deben apoyarse mutuamente y mostrarse un interés real. Una manera de solventar este compromiso moral y social con nuestra comunidad, puede comenzar con procurar ser buenos ciudadanos, no importa si tenemos papeles o no.

Comencemos a ver cómo se puede cumplir esto con todas aquellas personas que ya son ciudadanos por nacimiento o naturalización. Ellos tienen el derecho y la responsabilidad cívica de votar en las elecciones locales y federales, lo deben hacer de una manera consciente y bien documentada, es decir, con pensamiento crítico. También pueden afiliarse a un partido político y ayudar en una campaña. Así mismo, pueden unirse a un grupo cívico y compartir su opinión acerca de un asunto con un oficial electo. Otra posibilidad de mostrar interés, es enviando una carta o mensaje con alguna preocupación de la comunidad a un periódico, eso está contemplado como un derecho constitucional.

Otra manera de mostrar interés por el bien común, es contactando a senadores y representantes, apoyar u oponerse públicamente a un asunto o política específica. Otra cosa importante a considerar para los ciudadanos, es poder postularse a un cargo político. ¿Sabían que alguien que se ha hecho ciudadano por naturalización puede llegar a ser un Representante (diputado), Senador, Alcalde, Concejal o Gobernador? Para postularse para el Senado, un candidato debe haber sido ciudadano de los Estados Unidos durante al menos 9 años. Para postularse para la Cámara de Representantes, un candidato debe haber sido ciudadano de los EE. UU. durante al menos 7 años. Para postularse a la presidencia de los Estados Unidos, un candidato debe ser un ciudadano por nacimiento (no naturalizado).

Por otro lado, las personas que están esperando regularizar su estatus migratorio, también pueden procurar ser buenos residentes mientras esperan la ciudadanía. Hay muchas maneras en las que se puede tomar acción cómo son, cumplir las leyes y reglamentos, tener conciencia política para provocar el dialogo entre la familia y con los amigos que son ciudadanos acerca de la importancia de participar cívicamente.

Algo que podemos hacer todos sin importar estatus migratorio, es ayudar a nuestra comunidad en los proyectos que se refieran a mejorar nuestra calle, vecindario o ciudad o algo tan elemental cómo conocer a nuestros vecinos. Considerar siempre trabajar de manera honesta, respetar los señalamientos de tránsito, no cometer actos fuera de la ley, no manejar un automóvil bajo la influencia del alcohol u otra sustancia, informarse y mantenerse al corriente de las noticias locales y aprender inglés.

Y si aún les quedan dudas sobre qué nos ayuda a ser mejores ciudadanos, aquí algunos ejemplos más de actividades: donar sangre, capacitarse para enfrentar emergencias, mantenerse sano, ofrecer tiempo y talento como voluntario, reciclar y hacer composta, no tirar basura y recoger la basura que vea en la calle, no desperdiciar el agua, usar el transporte público en lugar del auto cuando sea posible, respetar la diversidad, cuidar el medio ambiente, rechazar la violencia y cooperar con diversas comunidades en programas públicos, etc, etc. Al final, con o sin documentos, es nuestra responsabilidad como seres humanos de ser buenas personas, cuidar nuestro medio ambiente y comprometernos con nuestro entorno.

Toda esta lista de acciones nos harán ser una mejor persona, mejores ciudadanos y tendremos resultados positivos de manera directa. Les invito a comentar conmigo este tema en redes sociales, búsquenme como Paco Diaz en la Red. Recuerden que los latinos que nos comprometemos a ser buenos ciudadanos y residentes ¡Somos más fuertes!