Condenan en Seattle la prueba de ingresos de “carga pública” de Trump

Un gran volumen de comentarios del público puede impedir o prevenir la implementación de la regla

SEATTLE— Personas que pueden verse afectadas por la regla de “carga pública” propuesta por Trump deben continuar participando en programas cruciales de salud, vivienda y nutrición, dice un grupo de defensores, abogados de inmigración y proveedores de servicios sociales llamados la coalición de Protección de Familias Inmigrantes – Washington.

“El uso de cupones de alimentos, Medicaid u otros beneficios puede ayudarlo a usted y a sus familiares a ser más sanos, fuertes y estables financieramente en el futuro”, dijo Huma Zarif, abogada de Northwest Health Law Advocates. “No hay necesidad de dejar de recibir estos beneficios en este momento”.

Si se finaliza, un proceso que puede tardar varios meses, cualquier persona sujeta a la regla tendrá tiempo para actuar antes de que entre en vigencia. Las familias que recibieron beneficios legalmente antes de que se finalizara la regla no serían penalizadas.

La regla propuesta impondría efectivamente una prueba de ingresos a la inmigración basada en la familia y asustaría a millones de familias de los beneficios públicos cruciales para los que ellos o sus hijos son elegibles. Amplían los criterios según los cuales las autoridades de inmigración pueden negar el estatus de residente permanente si un solicitante utiliza legalmente servicios públicos con fondos federales como Medicaid, Sección 8, cupones de alimentos y subsidios de medicamentos recetados de la Parte D de Medicare.

Muchos inmigrantes en los Estados Unidos mantienen a sí mismos y a sus familias a través de trabajos de bajos salarios que no brindan seguro de salud y, por lo tanto, dependen de Medicaid para su atención médica o cupones de alimentos para ayudar a alimentar a sus familias. Muchas madres y padres tendrían que elegir entre aceptar ayuda para las necesidades humanas básicas (como alimentos, medicamentos y hogar) y mantener a sus familias unidas.

“Esa es una decisión imposible”, dijo Jorge L. Barón, director ejecutivo de Proyecto de los Derechos del Inmigrante (NWIRP), miembro de la coalición de Protección de Familias Inmigrantes – Washington que se formó después de que se conoció la noticia de los planes de Trump el año pasado.

La regla también impondría efectivamente una prueba de ingresos a la inmigración, lo que dificultaría que las familias que ganan menos del 250% de la línea federal de pobreza permanezcan juntas permanentemente en los Estados Unidos – un obstáculo que un tercio de la población total de los Estados Unidos sería incapaz de superar. El factor basado en los ingresos en la regla propuesta podría significar que los funcionarios de inmigración podrían negar a las personas que trabajan en trabajos importantes, pero mal pagados, como los trabajadores de salud de hogar y conserjes, la posibilidad de permanecer en los Estados Unidos o reunirse con sus familias aquí.

La propuesta de Trump también describe otros factores negativos que podrían hacer que los inmigrantes sean considerados “cargos públicos”, como no tener educación universitaria, tener un inglés limitado o simplemente ser menor de 18 años o mayor de 62 años.

Con la publicación de la regla y la publicidad que lo acompaña, es probable que más inmigrantes eviten los servicios debido a la preocupación por comprometer su estatus migratorio. Los efectos secundarios repercutirán más allá de la población a la que se dirige el reglamento, debido a la complejidad y la confusión en torno a quiénes se verán afectados, y en qué programas. Los padres pueden temer llevar a sus hijos al médico para vacunas pediátricas, y las mujeres embarazadas pueden sentirse desalentadas a aceptar asistencia para lactancia y nutricional, aunque estos programas no se consideran parte de la “carga pública” en la propuesta actual.

“Aquí hay un ataque más de la de visión miope y cruel de Trump contra nuestro futuro”, dijo Barón. “Plantea amenazas claras para familias de bajos ingresos, personas mayores, personas con discapacidades, inmigrantes y personas de color”.

Las familias que se preguntan si están afectadas por esta regla deben saber que no están solas; hay formas de luchar.

Los miembros del público pueden presentar comentarios en oposición a la implementación hasta el 10 de diciembre. Un gran volumen de comentarios puede impedir o prevenir la implementación de la regla, ya que los funcionarios federales deben leer cada comentario y considerar cómo enmendar la regla propuesta.

Los miembros de la coalición están reuniendo 4.000 comentarios públicos al Departamento de Seguridad Nacional (DHS) de individuos y organizaciones del estado de Washington. Miembros del publico pueden entregar comentarios directamente con este link: https://protectingimmigrantfamilies.org. Más información y sobre la campaña nacional de Protección de Familias Inmigrantes está disponible en www.protectingimmigrantfamilies.org.