Por Joseph Campagna, Schroeter Goldmark y Bender

Las personas heridas en colisiones de auto enfrentan un confuso enredo de reglas y obligaciones. Una persona lesionada a menudo está tratando de sanar de una lesión, adaptarse a una vida con cambios significativos, pagar las cuentas médicas, y hacer frente a los ajustadores de seguros. Para algunas personas, su lesión limita su capacidad para trabajar mientras se recuperan. Este proceso puede ser lento, confuso y frustrante.

Tener un buen abogado desde el principio es fundamental para preservar sus derechos. En primer lugar, necesita un abogado en la negociación con la compañía de seguros para el conductor que fue culpable en la colisión. Si alguien más fue culpable y causó sus lesiones, pueden ser responsables de compensarle por sus gastos médicos, así como por su dolor y sufrimiento.

En muchos casos, esto significa negociar con la compañía de seguros del otro conductor. Si usted acepta una compensación por sus lesiones de la compañía de seguros del chofer en culpa, por lo general no puede solicitar más compensación en una fecha posterior, incluso si usted descubre que sus lesiones fueron más graves de lo que pensó por primera vez. Por esa razón, es muy importante asegurarse de que conozca la totalidad de sus lesiones cuando resuelve su caso. Un buen abogado puede ayudar con ese proceso.

Lamentablemente, los casos de colisión de auto a veces toman mucho tiempo para resolver. Y mientras tanto, usted puede tener facturas médicas acumulándose o perder salarios por estar fuera del trabajo. Su propia póliza de seguro de auto puede ayudarle a cubrir estos gastos. Muchas pólizas de seguro de automóvil tienen protección contra lesiones personales (PIP). En Washington, todas las pólizas de automóviles tienen esta cobertura a menos que rechace la cobertura por escrito (si su compañía de seguros dice que rechazó la cobertura PIP, pida ver la prueba por escrito). La cobertura de PIP es “sin culpa”, lo que significa que se aplica independientemente de quién fue culpable en el accidente. Y puede ayudar a pagar los gastos médicos y los salarios perdidos en este momento, mientras que su reclamación contra el otro conductor está pendiente. En algunos casos, usted puede tener derecho a la cobertura de PIP incluso si usted no tiene ningún seguro usted mismo. Por ejemplo, si usted es un peatón golpeado y herido por alguien que conduce un automóvil, puede estar cubierto por la póliza de PIP del conductor. Una vez más, un abogado puede ayudarle a determinar qué tipo de cobertura puede estar disponible para usted. En algunos casos, las lesiones de una persona son tan graves que la compensación que usted merece es más que la cobertura de seguro del otro conductor. O tal vez el otro conductor no tenía seguro en absoluto. En estos casos, si tiene un seguro, puede tener derecho a una compensación de una póliza de “Uninsured o Underinsured Motorist”. Esto significa que su propio seguro ayuda a cubrir la diferencia entre sus lesiones y la póliza de seguro limitada o inexistente mantenida por el conductor en falta.

Por último, cuando reciba una recuperación para compensarle por sus lesiones, su propio seguro de salud puede exigir el reembolso de cualquier dinero que haya pagado por su tratamiento médico. Aunque pueden exigir un reembolso completo, en muchos casos un buen abogado puede negociar con su seguro de salud para que acepten un reembolso reducido. El objetivo de un buen abogado es asegurarse de que obtenga la compensación más completa posible por sus lesiones, con el mínimo posible de ir a cualquier otra persona para el reembolso.

En Schroeter Goldmark &Bender, tenemos años de experiencia en la representación de clientes con lesiones graves por colisiones de automóviles. Estamos disponibles para hablar con usted o con su ser querido acerca de su caso de lesión en cualquier momento