Inmigrantes tienen tasas de delincuencia considerablemente menores que sus los nacidos en Estados Unidos

Por Esther Cepeda,

The Washington Post

El gobierno de Trump utiliza incidentes para ilustrar la narrativa de los violadores y asesinos provenientes del sur de la frontera, que Donald Trump promovió desde que anunció su candidatura a la presidencia. Ingresar en Estados Unidos sin permiso—o entrar con una visa y quedarse después de que se venza—es una infracción civil, no penal.

En un análisis de datos de la Universidad de Texa, reiteraron las tasas de criminalidad bajas entre los inmigrantes y no hallaron “ninguna prueba de que los nacidos en el exterior, inmigrantes en primera generación, reportaran menos su historia de arrestos. De hecho, cuando hay pruebas de divergencia, se debe a que los inmigrantes reportan excesivamente los arrestos.” Investigaciones iniciadas hace un siglo afirman que los nacidos en el exterior tienen tasas considerablemente menores que sus pares nacidos en Estados Unidos, de involucración en delincuencia. Cuando el FBI da a conocer los datos sobre delincuencia, no da a conocer la proporción de arrestos que son cometidos por los indocumentados—sus cifras provienen de 15.000 y tantos departamentos de policía que no tienen la categoría migratoria como parte de su recolección de datos, así es que no sabemos cuántos son indocumentados, y tampoco sabemos cuántos viven aquí. Tenemos cálculos aproximados de unos 11 millones, pero no sabemos con seguridad. Por ejemplo, hasta 2013, el FBI no clasificaba a hispanos—se los sumaba a las categorías de blancos o negros. Uno podría recoger información sobre la categoría legal para demostrar que los indocumentados no son un problema, pero entonces, eso podría abrir la puerta para que fueran detenidos y deportados.

Así es que debemos confirmarnos con lo que tenemos, a fin de comprender quién comete delitos. Según el informe más reciente del Departamento de Justicia sobre estadísticas de arrestos federales, en 2014 no-ciudadanos de Estados Unidos representaron el 41,8 por ciento de aquellos acusados por el Tribunal Federal de Estados Unidos y el 37 por ciento de ellos estaba en el país sin autorización legal. Estamos hablando de 23.783 acusados presentes ilícitamente, de una población total nacida en el exterior de 42 millones, en 2014. Eso equivale a una tasa de 0,057 por ciento de todos los inmigrantes nacidos en el exterior acusados en tribunales federales, y alrededor de un tercio de esos casos fueron relativos a inmigración.