La Cosa Está Que Arde

Por Sophia Vackimes Coordinadora de Servicios de Emergencia Oficina de Bomberos, Ciudad de Bellevue

Diferentes zonas del Estado de Washington tienen eventos climáticos recurrentes. Estas zonas son a la vez influenciadas por los cambios que estamos acelerando nosotros los seres humanos. Las industrias, el uso de automóviles, la compra de productos empaquetados en plásticos, etc. son causa de que se acelere la contaminación que altera al medio ambiente y provoca el calentamiento global. Debido a los cambios climáticos que se crean, por ejemplo con la combustión de los automóviles que queman gasolina, cada año estos eventos se vuelven más violentos. La sequía, las altas temperaturas, y el descuido humano aumentan los efectos catastróficos de los incendios, las tormentas, etc.

Aún hay regiones donde hay el clima aún pasa de una estación del año a otra con regularidad pero también las hay donde eventos que eran previsibles se han acelerado de manera decisiva y peligrosa. Tenemos que preparados para confrontarlos. Si vivimos en poblaciones donde cada año hay nieve, pues nos preparamos para ello, y lo mismo sucede para zonas donde llueve o hace calor con regularidad. El calentamiento global afecta no solo a lugares donde hace frío o donde hace calor con regularidad, sino que causa que donde hacía frio ahora haga más frío, mientras que donde solamente hacía calor hace más o hay inundaciones terribles. Las consecuencias de esto son claras: por ejemplo, en el Caribe cada año se registran más y más huracanes, y cada año se tornan cada vez más y más destructivos. Y hay regiones donde se detectan bajas en las temperaturas que anteriormente no se habían registrado.

Hay muchísimas cosas que podemos hacer para protegernos durante eventos extremos. Tenemos que mantenernos calientes durante el invierno y a la vez no causar incendios en nuestros hogares; tenemos que ser responsables. Debemos de estar siempre alertas a nuestras acciones puesto que muchas veces nosotros los causamos. Hay que tener en cuenta que cada compra que hagamos donde tomemos bolsas de plástico nuevas del supermercado o que cada viaje inútil (aunque de pronto no nos lo parezca) de un lado a otro genera contaminación atmosférica que a la larga nos va a afectar ya sea con cambios reflejados con mucho calor o mucho frío.

Poner atención a los medios de comunicación y seguir las instrucciones de las autoridades es de suma importancia. Este invierno esperemos que no haga mucho frío. Según han anunciado las agencias metereológicas no lo hará, pero no dudemos que puedan haber cambios súbitos. Es muy importante recordar que no debemos calentarnos con carbón, ni guisar, dentro de nuestros hogares. Esto es sumamente peligroso puesto que la combustión que genera produce gases peligrosos inodoros que podrían poner en peligro nuestras vidas y las de nuestros semejantes. También hay que hacer conciencia de qué tanto necesitamos ir de compras y renovar todas nuestras decoraciones para la temporada de fiestas invernales. Uno de los problemas más fuertes de la temporada es la cantidad de incendios que se causan cuando se sobrecargan las conexiones electricas o se prenden velas decorativas dentro del hogar. Es sumamente importante mantenernos seguros así como reflexionar seriamente sobre el impacto que tienen en cuanto a medio ambiente todos nuestros actos.