Por TOM BANSE Red de Noticias del Noroeste

Un gran rebote en la población de leones marinos a lo largo de la costa oeste en los últimos años ha creado una batalla constante para enfrentar a los animales protegidos. Son inteligentes y divertidos de ver desde una distancia segura, pero también son ruidosos, malolientes y demuestran ser un dolor de cabeza para algunos puertos deportivos costeros.

“Es una especie de zoológico gratis, ¡pero no los acaricies!” observó a Dennis Craig, de Olimpia, mientras observaba que un muelle en el puerto deportivo Westport de Washington casi se hundía bajo el peso de docenas de toros corpulentos que empujaban y dormían al sol.

“Uno se da cuenta de que cuando llegan los charters, se moverán de par en par para que la gente pueda verlos más de cerca porque, como he dicho, es entretenido”, dijo Craig.

La otra cara de estos demonios de peces con aletas se puede ver en el proyecto de ley de la marina, incluido el costo de los muelles rotos, los montantes eléctricos rotos y la pérdida de negocios.

“Casi todos nuestros ingresos netos se utilizaron para reparar los daños causados por los leones marinos este año, eliminando esos fondos de las mejoras de infraestructura y los reemplazos que son críticos para la instalación de la marina y nuestros usuarios”, dijo la gerente de negocios de Westport Marina, Molly Bold, en un correo electrónico. .

Los leones marinos han impedido a las personas amarrar sus barcos. En otros casos, los pescadores comerciales han tenido que correr de lobos marinos para llegar a sus embarcaciones. Los leones marinos incluso arrebataron a algunos perros de compañía a los muelles, dijo el copropietario de Westport Aquarium Marc Myrsell, quien se ofrece como voluntario para monitorear a los mamíferos marinos.

Myrsell ha contado hasta 200 o 300 leones marinos en los muelles a la vez.

“Si una persona está caminando por el muelle y tiene una bolsa en la mano, ese león marino en su mente podría pensar que esa persona tiene comida y puede volverse agresiva porque algunas personas la han estado alimentando, intencionalmente o no”, dijo Myrsell en una entrevista.

La abundancia actual de lobos marinos es al menos siete veces mayor que la población registrada a fines de los años sesenta. La proliferación de leones marinos ha creado problemas desde Neah Bay, Washington, hasta Puget Sound.

Y Westport, Washington, ni siquiera es el peor de los casos. Astoria, Oregon, atrae a la mayoría de los leones marinos.

La Patrulla de Leones Marinos en el agua está autorizada a lanzar petardos submarinos llamados “bombas de foca” cuando los leones marinos se acercan demasiado a los pescadores recreativos en la desembocadura del río. De lo contrario, los leones marinos arrebatan el salmón antes de que los deportistas puedan atrapar sus peces.

Los problemas en los puertos deportivos continúan porque los leones marinos son inteligentes y habituarán a la mayoría de las estrategias de disuasión, dijo Anderson de la NOAA.