No se ve nada…..

Sophia Vackimes, Coordinadora de Servicios de Emergencia en Español, Ciudad de Renton

Noche de tormenta … como en una buenísima película en blanco y negro … relampaguea, llueve, nieva. Estamos en casa tratando de ver la televisión y escuchamos que caen rayos a los lejos. Poco a poco se van acercando los ruidos, nos preocupamos un poco y pensamos que están lejos, que nada nos pasará. Contamos los segundos entre un sonido y el otro, caen más rayos. De pronto. PUM. Absoluto silencio. Nos quedamos quietos esperando que aparezca la película de nuevo. Iba tan bien la historia. El malvado estaba a punto de matar a su víctima, pero justamente en el momento culminante se ha ido la luz. PUM, de golpe ya no vemos nada, no vemos ni donde está la televisión. Deseamos que la luz vuelva inmediatamente, y que un comercial haya interrumpido la historia….que no nos hayamos perdido nada, no vemos nada. Nos hemos quedado sin luz. Es un momento altamente irritante.

Nos levantamos y lo primero que hacemos es pisar al perro. No lo vimos; luego nos tropezamos con la mesita que se halla frente a nosotros y donde estaba nuestro refresco con sus hielitos. Tratamos de ir a la cocina a buscar un trapo para limpiar y unas velas viejas que dejamos por ahí hace años. Nos desesperamos. Luego de abrir y cerrar cajón tras cajón hallamos las velas pero ahora no están los cerillos. Sí, que bueno que dejamos de fumar, pero ahora necesitamos cerillos para encender las velas, las veladoras…..que complicación, y el papel no está. Comenzamos a arrepentirnos de todas las veces que pensamos en comprar una linterna y no lo hicimos. Ahora que nos urge no la tenemos, ni tampoco baterías, ni calentadores de manos ni nada. La luz tarda varias horas en regresar. No se ve nada. Temblamos de frío.

Hay varias cosas que podemos hacer para prevenir que nos agarre desprevenidos una falla de suministro eléctrico. Para comenzar, debíamos haber apagado la televisión cuando se inició la tormenta. Es posible que cuando regrese la luz nos demos cuenta de que se fundió el aparato porque no lo desconectamos antes de que cayera el último rayo. La telenovela, el final de la historia, el continuar con el aparato encendido para saber qué sucedió cuando el malvado atacaba a su víctima, nos saldrá caro si cuando regrese la luz nos damos cuenta de que se ha fundido. Cuando hay tormentas eléctricas inmediatamente se deben desconectar las televisiones y computadoras. Es peligroso mantenerlas encendidas. Otra cosa que hay que recordar es que ni las velas ni las veladoras son lo más seguro para alumbrarnos en casa; durante el invierno muchos incendios son provocados por flamas vivas que caen sobre el mantel de la mesa, la alfombra, o la decoración de navidad. Lo que hay que tener siempre a mano son lámparas de baterías, y claro éstas deben ser nuevas y designadas para ser utilizadas sólo en casos de emergencia. ¿Qué más? Calentadores de manos (estos los venden en la tienda de herramientas y muchas veces en las tiendas de dólar), y cobertores adicionales por si el apagón durara más de un par de horas. Muchos de nosotros confiamos que en este país no se va la electricidad como en nuestros países de origen pero eso no es verdadero. La electricidad puede fallar donde quiera puesto que las tormentas hacen que árboles caigan sobre cables y torres eléctricas y eso puede suceder en todos lados. Algo que es extremadamente importante recordar es: cuando nos dé hambre, NO debemos de utilizar quemadores, anafres, braseros, estufas, calentadores, u hornillas de carbón o propano dentro de la casa. Es peligrosísimo. Podríamos morir envenenados por el gas que despide la combustión. Lo que hay que hacer con anterioridad es tener comida enlatada en la despensa para una situación como esta. Comida que se pueda comer sin cocinar. Pero hay que recordar que no nos la debemos comer sino solamente durante una emergencia, eso no es cosa de película.