Sophia Vackimes, Oficina de Gestión de Emergencias, Ciudad de Bellevue

Hoy, justo antes de venir al trabajo, intenté limpiar rápidamente mi cocina, porque no me gusta llegar tarde a casa y descubrir que tengo que recoger y limpiar antes de comenzar a prepararme la cena. Eso es algo que odio. Llevé la basura al fuera, tiré los restos en el dispensador del fregadero, colgué las toallas de cocina y me aseguré de que la estufa estuviera apagada.

Cuando pensamos en emergencias, tendemos a prestar mucha más atención a los grandes problemas que nos rodean que a lo que podemos prevenir en el hogar. Es parte de la naturaleza humana estar más motivado con los eventos que son catastróficos, como los que vemos en la televisión cada noche, que estar listos para resolver eventos sencillos antes de que se conviertan en un problemón.

Algo sumamente importante para pensar en casa es la prevención de incendios. La mayoría de nosotros cuidamos los artículos simples que podrían presentar un riesgo en el hogar. Por ejemplo, nos secamos los pies antes de salir de la ducha, por lo que no nos caemos al baño o cuidamos de poner pilas nuevas en la alarma de humo cada año, etc. Sin embargo, debe haber alguna razón por la que la mayoría de los incendios caseros comienzan en la cocina.

Hoy, al limpiar mi casa tomé conciencia especialmente de no colgar los paños de la puerta del horno. Tenía la mala costumbre de colgarlos allí, pero me he dado cuenta de que eso es algo extremadamente peligroso. Si mi comida se incendiara, debido a mi amor por hacer pollo frito, o los taquitos de pollo, el fuego podría extenderse a las toallas y habría creado un problema más grande y mucho más difícil de solucionar. Recientemente, uno de los estudiantes en una clase que organizo sobre seguridad en el hogar se fue a casa justo después de la clase y compró un extinguidor. Al cabo de un par de meses, ella tuvo un incendio en la cocina que logró extinguir rápidamente. Todos en mi oficina están muy orgullosos de su previsión.

Hay otras cosas que debemos tener en cuenta para tener un hogar seguro, y donde hallamos minimizado el riesgo de accidentes. Una cosa que tengo que resolver este fin de semana, y que es importante que haga de inmediato es asegurar mi nuevo estante para libros a la pared. Hace poco compré este mueble e inmediatamente procedí a llenarlo con libros, artículos decorativos, mi proyector de películas, enrutador de Internet, altavoces, etc. Ahora el librero se está inclinando. ¡He creado un peligro en el hogar: el librero que podría caerse debido al peso que carga o durante un terremoto! No podré escribir mi próxima columna hasta que resuelva este problema.