Luis Méndez
Agencia Reforma
MADRID, España 23-Mar .- El ex Presidente
español Felipe González se hará cargo de la defensa judicial de los opositores
venezolanos encarcelados por el Gobierno de Nicolás Maduro.
González, de profesión abogado, defenderá a Leopoldo López y Antonio Ledezma, ex Alcalde de
Caracas, luego de que familiares de los dos presos antichavistas se pusieran en
contacto con el dirigente socialista para pedirle ayuda y colaboración.
La decisión del ex Presidente del Gobierno español de representar jurídicamente a los opositores venezolanos estaría justificada por el continuo deterioro de la
situación de los Derechos Humanos en Venezuela y a la ausencia de garantías
jurídicas de los acusados, presos en la cárcel militar de Ramo Verde, en las
afueras de Caracas.
El líder socialista denunció recientemente el descenso en la defensa del funcionamiento
de la democracia en América Latina y abogó por un diálogo serio entre el
Gobierno y la oposición de Venezuela, luego de reprobar la detención de
representantes políticos en el país sudamericano.
La decisión de González coincide con la intención del Partido Popular (PP), que gobierna en España, de llevar esta semana al pleno del Congreso de los Diputados una proposición no de ley en la que se condena al régimen chavista y se pide la
liberación de los opositores encarcelados.
El texto del derechista PP surge tras la reunión mantenida la semana pasada por el
Presidente Mariano Rajoy con la esposa del ex Alcalde de Caracas, Mitzy
Capriles, que realizó una gira por España para denunciar los abusos del
Gobierno de Maduro.
El PP subraya en su iniciativa de condena del régimen venezolano que hasta la fecha ningún tribunal ha podido avalar las acusaciones que pesan contra Ledezma.
López se
encuentra recluido desde hace más de un año, mientras que el ex Alcalde de
Caracas, Ledezma, fue detenido el pasado 20 de febrero por agentes del Servicio
Bolivariano de Inteligencia (Sebin), antes de su ingreso en prisión.
Los líderes de la Oposición fueron acusados por el Gobierno de Maduro de formar parte de grupos
radicales con planes violentos para desestabilizar Venezuela.
Los dos principales presos del régimen chavista están acusados también de ser los
responsables del desenlace violento de las protestas de 2014 contra el Gobierno
de Maduro, que se cobraron más de 40 muertos en las calles venezolanas.
