Dulce final

Karina González

Agencia Reforma

Si bien algunos novios todavía cumplen con la tradición de partir el pastel de bodas, hoy en día existen otras opciones de postres que lo pueden sustituir o complementar.

Las mesas servidas con brochetas de gomitas, conos con palomitas y cajas con mentas de chocolate son una original propuesta que destaca por su variedad de sabores, texturas y colores.

“En una boda, se espera que los postres sean atractivos y novedosos. Este tipo de montaje es ideal y práctico.

“Para realizarlo, es necesario saber si la boda será de día o de noche. Esto definirá el tipo de base, ya sea cubierta de flores o rodeada con cubos de madera, y el uso de algunos accesorios complementarios como perlas, listones, diamantes o hasta botellas recicladas”, explicó la chef Maricú Ortiz.

Con la idea de orientar a los futuros esposos, la experta les pregunta sobre sus gustos; investiga, por ejemplo, si prefieren chocolates, malvaviscos o frutos rojos.

Después, les muestra una extensa lista con posibilidades de alimentos que les podrían agradar, como vasitos con queso de guayaba, cucharas con natilla de nuez o limón, tejas de almendra o macarrones dispuestos en torre.

Conocer anticipadamente el lugar de la boda le parece indispensable para definir la mejor ubicación de la mesa de postres, sea a un costado del salón o al centro del mismo.

En jardines, por ejemplo, es conveniente que estén techados o protegidos con lonas para así evitar que se derritan con el sol o se mojen con la lluvia.

También es importante para ella saber el estilo de la mantelería, los arreglos florales y los tonos principales de la decoración para lograr una coordinación visual en todos los elementos del evento.

“Buscamos que los postres sean ligeros y prácticos. Es importante que no requieran refrigeración y que tengan la suficiente durabilidad para estar perfectos a lo largo de la celebración.

“El dulce es el cierre de la comida o la cena y representa el recuerdo que todos guardarán de ella.

En ese sentido, es importante que las golosinas impacten y sean lucidoras”, subrayó Maricú.