Jorge Rivera

La Raza del Noroeste

Nuestro reportaje de primera página toma testimonios alrededor de un informe sobre el impacto de la recesión económica en las minorías étnicas. No son muy sorprendentes las conclusiones del reporte, de algún modo es de esperarse que muchos de los trabajos que se están perdiendo en la recesión sean de los que llamas poco calificados, donde muchos de los nuestros trabajan. Es muy fácil que un jefe de cuadra o mando medio en una empresa reduzca el número de empleos en estas áreas, por ser supuestamente fáciles de reemplazar con opciones de sub empleo, es decir contratos temporales o por hora, que cuesten menos en total. Pero lo que vuelve a preocupar son los comentarios acertados alrededor de este reporte, por ejemplo el hecho que hay más de los nuestros buscando empleo por día. Y más aún que hay empleadores que aumentan su abuso en estas condiciones, presionando para pagar menos, y amenazando a trabajadores sin documentos. Preocupa, pero no es sorpresa. Esta crisis económica ha mostrado de nuevo que no hay camino posible para nuestros inmigrantes, distinto a una reforma completa y justa al sistema de inmigración, que les permita ser reales y recibir protección contra los abusos. Es cierto que la ausencia de la ley permite a muchos trabajar que en teoría no podrían, pero tambien es cierto que el trabajo en condiciones abusivas es a veces peor. Las organizaciones que buscan una reforma considerada no pueden bajar la guardia en este mal momento económico. Todos debemos aportar algo, para que haya consciencia y se escuche la voz para pedir una solución justa con los trabajadores, al problema de inmigración.