Por Anne D’innocenzio Associated Press

NUEVA YORK (AP) – Walmart se ha ganado los elogios de los defensores del control de armas por su decisión de suspender la venta de ciertas municiones y solicitar que los clientes ya no porten armas de fuego abiertamente en sus tiendas. Pero si los movimientos se traducirán en menos armas en la calle sigue siendo una pregunta abierta. El anuncio del martes sigue pasos similares de otros minoristas que responden a la presión pública para restringir las ventas de armas y municiones. En marzo, Dick’s Sporting Goods dijo que dejaría de vender armas de fuego y municiones en 125 de sus más de 700 ubicaciones. Mientras tanto, Starbucks, Target, Wendy’s y más recientemente Kroger también han pedido a los clientes que no porten armas abiertamente cuando visiten sus tiendas. Los partidarios de leyes más estrictas sobre armas dicen que, como el minorista más grande de la nación, Walmart tendrá una influencia descomunal en el debate sobre armas, enviando un fuerte mensaje al Congreso y a otras corporaciones para que también tomen medidas. “Walmart merece un enorme crédito por unirse a la fuerte y creciente mayoría de estadounidenses que saben que tenemos demasiadas armas en nuestro país y que son demasiado fáciles de conseguir”, dijo Igor Volsky, director ejecutivo y fundador de Guns Down America, en un comunicado. . “Ese trabajo no termina con la decisión de Walmart hoy. Cuando el Congreso regrese para considerar la violencia armada, Walmart debería dejar en claro que apoya a los estadounidenses que exigen un cambio real ”. Aún así, la mayoría de las ventas de armas de fuego provienen de miles de tiendas de armas o exhibiciones de armas no afiliadas, no de grandes cadenas minoristas, por lo que no está claro qué diferencia harán los movimientos de Walmart. Alrededor de la mitad de sus más de 4,750 tiendas estadounidenses venden armas de fuego, o solo alrededor del 2% de todas las armas de fuego estadounidenses. La tienda de descuento con sede en Bentonville, Arkansas, dijo el martes que dejará de vender municiones para armas de fuego, así como municiones para fusiles de cañón corto, como el calibre .223 y el calibre 5.56 utilizado en armas de estilo militar, después de que se agote su inventario actual. Eso a su vez reducirá la participación de Walmart en el mercado de municiones de alrededor del 20% a un rango de aproximadamente 6% a 9%, según un memorando del CEO de la compañía, Doug McMillon. Walmart también suspenderá las ventas de armas de fuego en Alaska. Walmart dejó de vender pistolas a mediados de la década de 1990 en todos los estados excepto Alaska. El último movimiento marca su salida completa de ese negocio y le permite enfocarse solo en rifles de caza y municiones relacionadas. El minorista solicita además que los clientes se abstengan de llevar abiertamente armas de fuego en sus tiendas Walmart y Sam’s Club a menos que sean agentes de la ley. Sin embargo, dijo que no cambiará su política para los clientes que tienen permisos de transporte oculto. Walmart dice que agregará señalización en las tiendas para informar a los clientes de esos cambios. El anuncio de Walmart se produce pocos días después de que un tiroteo masivo cobrara siete vidas en Odessa, Texas, y sigue a otros dos tiroteos consecutivos el mes pasado, uno de ellos en una tienda de Walmart. El mes pasado, un hombre armado ingresó a un Walmart en El Paso, Texas, y mató a 22 personas con un arma de fuego de estilo AK que el minorista ya prohíbe la venta, marcando el tiroteo más mortal en la historia de Walmart. Un segundo tiroteo no relacionado ese mismo día en Dayton, Ohio, mató a nueve personas. Unos días antes de eso, dos trabajadores de Walmart fueron asesinados por otro trabajador en una tienda en Southaven, Mississippi. “En una situación compleja que carece de una solución simple, estamos tratando de tomar medidas constructivas para reducir el riesgo de que eventos como estos vuelvan a suceder”, según el memorando de McMillon. “El statu quo es inaceptable”. La Asociación Nacional del Rifle publicó un tweet atacando el anuncio de Walmart el martes. “Es vergonzoso ver a Walmart sucumbir a la presión de las élites antiaéreos. Las líneas en Walmart pronto serán reemplazadas por líneas en otros minoristas que apoyan más las libertades fundamentales de Estados Unidos “, dijo. Walmart dio un paso inicial al ordenar a los trabajadores en las tiendas de todo el país que eliminen los carteles y las pantallas de los videojuegos que muestran la violencia como una forma de ser más sensibles a los clientes después del tiroteo en El Paso. Aún así, eso estuvo muy por debajo de las demandas para que el minorista deje de vender armas de fuego por completo. Los críticos también han querido que Walmart deje de apoyar a los políticos respaldados por la NRA. El minorista se ha encontrado en un lugar incómodo con sus clientes y entusiastas de las armas. Muchas de sus tiendas están ubicadas en áreas rurales donde los cazadores dependen de Walmart para obtener sus equipos. Walmart está tratando de caminar por una línea muy fina tratando de abrazar su herencia de caza mientras es un minorista más responsable. Con su nueva política sobre “transporte abierto”, McMillon señaló en su memorando que las personas han tratado de hacer una declaración llevando armas a sus tiendas solo para asustar a los trabajadores y clientes. Pero hay clientes bien intencionados que actúan legalmente y que también han provocado que una tienda sea evacuada inadvertidamente y que se llame a las autoridades locales para que respondan. Al igual que otras compañías, Walmart no está aplicando una prohibición total porque no quieren poner a sus empleados en situaciones de confrontación.