De la camiseta a la corbata

(Agencia Reforma)

No es lo mismo ser universitario, salir un jueves y llegar “crudo” a tu clase de 7:00 del viernes y no ser productivo, que hacer lo mismo cuando trabajas y proyectar esa imagen en la oficina. “Entrar por primera vez a trabajar requiere que los que antes eran estudiantes cambien tanto su imagen exterior, como su forma de pensar”, afirma Álvaro Gordoa, vicepresidente y director de Desarrollo de Imagen Pública.

Las audiencias a las que ahora se debe tomar en cuenta ya no son sólo los padres ni una autoridad académica, sino jefes o compañeros de trabajo; la impresión que se proyecte hacia éstos es fundamental para ser aceptados, agrega.

Si se desea proyectar autoridad, se deben utilizar colores oscuros, como azul, gris, negro, telas delgadas, lisas, camisas blancas y zapatos de agujeta. Los zapatos no deben estar sucios ni dañados, dice Gordoa, pues hablan mucho en el mundo de los negocios, debido a que son un indicador de pulcritud en la persona.

También se debe cuidar la imagen de las manos, las cuales siempre deben estar limpias; en el caso de los hombres, se debe procurar cuidar el rasurado, ya que en la universidad se pueden dejar la barba de tres días, pero en el trabajo tienen que comunicar limpieza, añade. En el caso de las mujeres es necesario que tengan presente que no van a un antro, y que cuando van a trabajar, no deben usar el cabello muy arreglado o el maquillaje recargado, menciona.

Cuando se ingresa a trabajar se debe tomar en cuenta que se adquieren nuevas responsabilidades y que la autoridad laboral no es paternalista como la autoridad académica, asevera Miriam Mora, directora del Departamento de Experiencia Profesional. “Por ejemplo, si se falta a una clase no hay gran problema; pero si se falta un día al trabajo, la consecuencia es que te corran o no te pagan ese día”.

En una empresa ya no se tienen a los profesores detrás del alumno invitándolo a que estudie o se prepare más. “Cuando se está trabajando, la persona debe preocuparse por sí sola a seguir con una constante capacitación y actualizaciones”, agrega. “Es necesario definir hacia donde se desea trazar el camino profesional, detectar desde el primer trabajo la línea que se continuará en el ámbito profesional”.