José Antonio Plasencia

Agencia Reforma

MONTERREY, Nuevo León 1-Mar .- Las principales técnicas de auxilio están al alcance de cualquier persona, desde niños hasta mayores de 60 años, quienes pueden salvar a un paciente que sufra un paro cardiorrespiratorio.

En la actualidad, el tráfico vehicular retrasa la llegada de los socorristas, lo que pone en riesgo de perder la vida o de resultar con secuelas cerebrales a personas que sufran cualquiera de los dos citados casos.

Ángel Flores Gutiérrez, comandante de la Cruz Verde de Monterrey, informó que el primer paso para ayudar a una persona es reportar el accidente al puesto de socorros más cercano.

Pero en lo que llega el auxilio, cualquier ama de casa, estudiante o niño puede salvar la vida de la persona que sufre un paro cardiorrespiratorio.

El procedimiento para atender a una persona que cae en paro cardiorrespiratorio es darle maniobras de Resucitación Cardio Pulmonar (RCP).

De los tres pasos, que consisten primero en compresiones, después en abrir vía área y tercero dar respiraciones, con la aplicación de la primera se puede salvar a la persona.

“En las maniobras de RCP, con sólo hacer una maniobra de los tres pasos del RCP cualquier persona común puede salvar la vida de quien sufra un paro cardiorrespiratorio y hasta evitarle un daño cerebral.

“Desde niños de 6 años pueden asistir a la persona, esto es dándole compresiones entre el esternón y abajo de las tetillas, con esa simple maniobra la sangre que aún queda oxigenada se va recirculando al cerebro, corazón y pulmones, eso le da más probabilidades de sobrevivir y evitar daños cerebrales, al llegar los socorristas aplican el RCP”, dijo.

Agregó que cualquier persona está en posibilidades de aprender los tres pasos del RCP, con tan solamente tomar un curso intensivo.

Otros de los casos que pueden ser asistidos por cualquier habitante en general son los atragantamientos, cuyos pacientes también requieren una atención inmediata.

El comandante de la Cruz Verde de Monterrey precisó que utilizando la maniobra de Heimlich cualquiera puede salvar la vida de familiares, vecinos o transeúntes que tengan obstruida la vía área por algún objeto o comida.

“Son cuatro minutos los que tiene para sobrevivir cualquiera que presente un atragantamiento, a diferencia de la técnica de RCP, en la que hasta niños pueden ayudar, en este caso no, tendría que ser un joven o adulto por la fuerza que se requiere.