Staff Agencia Reforma
Qué mejor fecha que hoy, Día del Amor y la Amistad, para buscar entre las dulzuras que encuentre, la fórmula mágica para preparar algo realmente incitante para el ser que adora.
Suspiro de chocolate
1/2 taza de chocolate rallado semiamargo
3 barras de mantequilla
1 1/4 tazas de azúcar
5 huevos
1 pizca de sal
1 cucharadita de esencia de vainilla
1/2 taza de harina
1 cucharadita de polvo para hornear
7 cucharadas de almendra fileteada
7 cucharadas de almendra molida
Para el ganache:
1/4 taza de crema para batir
1 1/2 tazas de chocolate semiamargo
Para las cerezas trampadas:
1 docena de cerezas naturales
250 gramos de chocolate blanco
Preparación:
Derrita a baño María el chocolate junto con la mantequilla y deje enfriar a temperatura ambiente; agregue las almendras fileteadas y molidas.
Aparte, en un recipiente ponga los huevos y bátalos hasta que espumen; poco a poco, vaya agregando el azúcar y siga batiendo hasta que doble su volumen; añada la vainilla.
En otro recipiente mezcle todos los ingredientes secos y añádalos a lo anterior, cerniéndolos y mezclándolos de manera envolvente.
Incorpore a lo anterior la mezcla de chocolate y vacíe todo esto en un molde previamente engrasado y enharinado.
Métalo al horno a una temperatura de 200 grados centígrados durante 25 a 30 minutos. Una vez que esté listo el pan, retírelo del horno y déjelo enfriar.
Para hacer el ganache, ponga en el fuego la crema; cuando ésta empiece a hervir, retírela de la lumbre y añádale el chocolate en trocitos, para que luego lo revuelva hasta que se derrita.
Para preparar las cerezas, derrita el chocolate a baño María. Luego, sumerja las cerezas en el chocolate hasta la mitad, de manera que quede una mitad roja y otra blanca.
Una vez que tenga todo listo, corte el pan con cortadores en forma de corazón y cúbralos con el ganache de chocolate; deje enfriar.
En cada plato que vaya a servir los corazones, primero ponga pétalos de rosa, encima el pan y, al final, las cerezas trampadas alrededor.