@- Byline:Patricio Ríos Hinojos @- BylineAttribution:Especial para La Raza del Noroeste Mientras escuchaba la confesión del beisbolista, mi emociones me provocaron llegar al punto de gritar, "que idiota". Aquí esta un joven que tiene todo a su disposición y lo arriesgo todo. Y después, tener la audacia de lavarse las manos con decirle al público que ya no es un joven inmaduro pero ahora ya es más responsable. Ha llegado el tiempo más que nunca, en que tenemos que tomar responsabilidad y sinceramente sentir pena por nuestras acciones; y al mismo tiempo estar listos para recibir lo merecido. Quizás pudiésemos usar del ejemplo del filosofo Sócrates. Un día Sócrates recibió visita de un amigo, el cual le sugería que se escapara y huyera del que supuestamente muchos pensaban era un castigo injusto. El filósofo rehusó la sugerencia y escogió enfrentar su castigo, tomando responsabilidad por sus acciones. El hecho de que no escogió romper las leyes judiciales y estuvo dispuesto a aceptar ‘su medicina’, nos ilustra un ejemplo de un individuo al que su conciencia le provoco convicción, al punto de reconocer su culpabilidad en sus acciones morales. Mis estimados amigos, no importa de que rango de la sociedad vengas, el contador de tu integridad reflejará lo que usted le hecha o lo que usted le deposita. Yo siempre lo comparo como si uno tuviese dos perros y al perro que mas le da de comer; ese será el ganador de las peleas. En otras palabras; si usted alimenta al lado que ladra honestidad; los ingredientes incluirán ser genuino, autentico, integro, con respeto por sí mismo al igual que con los otros, y la decencia de enfrentarse con la verdad cara a cara. Empero, si usted invierte sus esfuerzos en engordar al lado que ladra agresivamente, entonces los resultados serán ingredientes tóxicos y venenosos. Los característicos serán como falsedad, comportamientos secretos y ocultos, falta de respeto a todo el mundo, ladrón, mentiroso, y falta de principios morales. Desafortunadamente siempre vivimos en un mundo de maldad y deshonestidad. A pesar de los logros y los avances de este país; el perro de racismo y de injusticia sigue ladrando. Desgraciadamente la sociedad compone estos comportamientos de deshonestidad y palabras manipuladas de estos personajes, resultando en librando al individuo de sus responsabilidades y de no aceptar su medicina merecida. Lamentablemente nuestra sociedad tiene las tendencias de disculpar injustamente los malos hechos por individuos basados en el rango de la persona, su color, su religión y su afiliación política. La lista de estos son deportistas profesionales, políticos, maestros, ministros, padres, doctores, la lista es larga. Sin embargo, son pocos los nobles, los honestos, los justos, y los buenos samaritanos; los cuales raro se mencionan o se sabe de ellos. Hace un par de meses atrás que viajábamos mi esposa y yo de regreso de California. Tomamos nuestros asientos cuando repente escuchamos en voz alta, "Do you speak English? La respuesta de esta ancianita era "Yes I speak English". Se volvió a repetir la misma interrogativa, la cual se le dijo afirmativamente que la ancianita hablaba ingles. Después de que la ancianita de raza filipina le contesto con la misma respuesta, lo que paso después me sacó de onda. Se le pidió que leyera una porción del cartucho que llevaba las instrucciones en caso de una emergencia. La gracia de un señor sentado al lado de esta pobrecita ancianita intervino quejándose por el maltrato hecho. Se le preguntó a la señorita de la aerolínea X que por que se comportaba de tal manera, ella contestó, ‘queria saber si me estaba diciendo la verdad’? Solo porque la ancianita se sentaba en la fila marcada, salida de emergencia’; esta mujer la humillo públicamente. What truth was she looking for? Qué verdad buscaba? Ya sea que la persona gane salarios mul ti-millonarios jugando un deporte profesional, cortando los verdes de un campo de golf, o simplemente sea una ancianita viajando a ver a sus hijos y nietos; todos son iguales y merecen el mismo respeto pero también el mismo castigo cuando cometen un delito. Lamentablemente siempre existen incidentes tales como los mencionados. Pero la desgracia más grande es, que los que se comportan injustamente faltan de ser responsables, porque la sociedad se cubre los ojos de la justicia, permitiendo que la merecida medicina de castigo sea barrida de bajo de la alfombra sucia de la injusticia. Aristóteles dijo, "somos un resumen de nuestras acciones y nuestros hábitos hacen toda la diferencia. Aprendemos cuando lo aprendido es practicado". En otras palabras al perro que usted le da de comer más, siempre prevalecerá. Aun que el refrán dice, "las acciones hablan más que las palabras". Por favor, solo digan la verdad y sean responsables por sus acciones!