Bajo un lente objetivo

Reflexiones

La Raza del Noroeste

La desaparición de los tres hombres hispanos de Lakewood continúa en suspenso.

Tres cuerpos fueron encontrados el jueves de la semana pasada en un vivero de la ciudad de Kent. Varios periódicos incluyendo el muy reconocido Seattle Times, publico que la identificación de los cuerpos tardaría hasta el lunes, han pasado ya varios días y seguimos sin saber si los cadáveres pertenecen a Yazmany Quezada Ortiz, Jesús Bejar Avila y Christian Alberto Rangel.

Como reportamos en nuestra historia de pagina 3 hasta el momento los familiares de los jóvenes han dicho que la policía no les ha informado nada. Los familiares nos informaron que la policía les había dicho que tendrían noticias para el martes, pero nunca les llamaron.

¿Por que tanto misterio?

Como periodistas hemos intentado ponernos en contacto con las autoridades policiacas pero no hemos logrado obtener información de la investigación. Autoridades allegadas a la investigación le revelaron al Seattle Times que en efecto, los cuerpos de las tres personas halladas muertas son de los tres hombres. Se podría suponer que las autoridades siguen alguna linea de investigación que podría verse comprometida al dar a conocer las identidades de los cuerpos.

Nos guste o no, a veces las autoridades necesitan más tiempo en buscar respuestas, que al hacerlas publicas podrían dañar la investigación. Al final, sean o no los cuerpos de los tres muchachos desaparecidos, ha ocurrido un homicidio que necesita ser investigado. Hay un culpable y una victima. El criminal debe pagar por su crimen, y la victima debe encontrar justicia aunque ya no este viva.

La espera y la incertidumbre es difícil, cuando uno forma parte del grupo afectado. Pero debemos mantener en mente que cuando se conozca la identidad de los cadáveres, las personas van a querer respuestas, y se dirigirán a las autoridades para obtenerlas. En ese momento comprenderemos por que la tardanza en revelar las identidades.

Sean o no los cadáveres de los tres jóvenes desaparecidos, las familias tendrán que vivir con dudas que tal vez puedan ser respondidas tras una investigación policial o no. Por ahora solo nos queda esperar.