Batalla en terreno nuestro

Reflexiones

La Raza del Noroeste

La historia que ocupa nuestra primera plana esta semana es, amigo lector, tan importante como pocas, para quienes hemos decidido hacer nuestra vida en esta región de los Estados Unidos.

El sistema e-Verify y los cambios en requisitos para obtener licencia de conducir son ejemplos de movimientos que están apareciendo en el país, y que nos impactan.

¿Qué son, en el fondo, estos cambios y qué los motiva?

La respuesta es simple, son cambios que pretenden cerrar las oportunidades de trabajo a inmigrantes sin documentos; detrás de quienes los proponen se adivina una intención de frenar de este modo lo que llaman la inmigración ilegal.

Iniciativas de este tipo existen porque el sistema jurídico federal de este país permite que nazcan en cualquier parte y comiencen a extenderse sin control del gobierno federal, así operan gran parte de los cambios en este país, para bien y para mal.

Pero, ¿por qué toman vuelo estas de tono represivo contra el trabajador sin documentos?

Porque no existe una ley de inmigración coherente que resuelva el problema por su base, la de dar oportunidades a la inmigración si se necesita mano de obra de otros países.

Y, la realidad es que sí se necesita.

Aunque haya desempleo del 10% o más, son muchas las actividades que suceden en áreas de la economía y en regiones donde quienes no tienen empleo no quieren trabajar, y entonces no se puede mover la economía sin mano de obra inmigrante.

Por eso la mayoría de sectores que dependen de la mano de obra inmigrante apoyan iniciativas que detienen estos programas represivos.

Eso está sucediendo por todo el país, pero las respuestas de qué se cambia y qué no, son diferentes en cada estado, por eso nos enfocamos en donde vivimos nosotros,

Los cambios en el estado de Washington nos afectan a nosotros, y debemos involucrarnos en estas decisiones; el aporte de quienes viajan desde lejos a participar en eventos legislativos como el de la semana pasada es muy valioso y merce aplauso.

Porque si no hacemos nada porque se escuche nuestra voz, entonces no podemos quejarnos cuando los cambios que sucedan nos afecten.