Carlos Marí y Rolando Chacón

Agencia Reforma

MÉXICO, DF .- Jefes policiales fueron asesinados el domingo en Río Blanco, Veracruz, y en Sonoyta, en la frontera de Sonora con Arizona, informaron ayer autoridades.

Gustavo Ordaz Alamillo, director de la Policía Municipal de Río Blanco, fue asesinado por un par de sujetos que lo balacearon cuando jugaba futbol en un centro deportivo de la cabecera de ese municipio.

En el ataque dirigido a Ordaz Alamillo, según los primeros reportes de las autoridades, otras tres personas resultaron heridas por las ráfagas de las armas largas que dispararon los sicarios, mientras que al menos una decena que observaba el partido entró en pánico.

Los hechos se registraron la tarde del domingo, en el Deportivo Benito Juárez.

En el caso del mando policiaco, falleció momentos después de haber sido internado Hospital Regional de Río Blanco.

En tanto, en Sonoyta, el subdirector de la Policía Municipal, Saúl Fernando Félix del Castillo, fue asesinado de un disparo.

Su cuerpo fue encontrado la mañana del domingo en las afueras de la cabecera municipal.

La Procuraduría de Justicia de Sonora informó que el cuerpo del mando fue hallado cerca de las 8:20 horas, a orillas de la Colonia Burócrata, en un terreno baldío a los pies de un cerro.

“Elementos de las diferentes corporaciones implementaron un operativo para dar con los responsables de los hechos”, informó la dependencia.

A través de redes sociales, ciudadanos de Sonoyta mencionaron que el subdirector policiaco habría sido “levantado” por un grupo armado la madrugada del domingo, cuando transitaba en una camioneta Escalade de color negro.

La violencia en este municipio fronterizo se desbordó en el último día de abril con enfrentamientos en la zona urbana y principalmente en la zona rural, donde unas 2 mil 500 personas abandonaron cuatro poblaciones ante amenazas del grupos armados.