Gerardo Romo

Agencia Reforma

ZACATECAS, Zacatecas 29-Jul .- Estudiantes universitarias, hijas de mexicanos, proclamadas como “reinas” de clubes de migrantes zacatecanos en Estados Unidos, exigieron al Presidente Enrique Peña Nieto que presione a Barack Obama para que se proteja a los niños deportados e impulse una reforma migratoria que ponga fin a las constantes violaciones a los derechos humanos de millones de mexicanos en aquel país.

“Exigimos que a nivel nacional el Presidente Peña Nieto trabaje con Barack Obama para ponerle fin a todas las violaciones a los derechos humanos de los mexicanos que están en Estados Unidos.

“A muchas familias las están separando por las deportaciones masivas, es un daño muy grande, sobre todo en el caso de los niños”, señaló Marlene González, reina de la federación de clubes de Illinois.

La voz de las jóvenes hijas de padres zacatecanos y nacidas en Estados Unidos se hizo escuchar en el Congreso del Estado ante sólo nueve de los 30 diputados locales.

“Es muy lamentable que niños chiquitos tengan que ponerse en riesgo de muerte por estar con sus padres y las autoridades no las protejan y en cambio se den deportaciones masivas”, lamentó Mariela Mora, reina del club “San Mateo”, del municipio de Valparaíso, del cual se calculan al menos 25 mil habitantes en Estados Unidos.

Alejandra Montes tiene 19 años, es hija de padres zacatecanos, forma parte del programa California Mini Corp que ofrece ayuda a niños migrantes que se quedan solos por la deportación de sus padres.

“He visto mucho la deportación de los papás y los niños se quedan solos con parientes y psicológicamente están muy afectados porque se sienten abandonados, no pueden concentrarse en la escuela, pues no saben cómo están sus papás”, señaló.

“El Gobierno de México y Estados Unidos deben proteger a los niños migrantes”, exigió Alejandra, quien recuerda que debido a una ley promulgada recientemente si una persona es capturada por la Policía para ser deportada y tiene hijos nacidos en Estados Unidos tiene derecho a permanecer en el territorio siempre y cuando tenga un expediente libre de delitos y crímenes.

“Eso lo ignoran los migrantes y por presiones los hacen firmar su deportación”, explicó la joven.

Con la reforma migratoria, se reduciría el sufrimiento y habría menos muertes, coincidieron las jóvenes, algunas de las cuales han vivido el drama de la deportación.

“Yo viví la separación de mi madre hace cuatro años por una deportación, es algo que no esperas y nadie está preparado, es un proceso difícil, doloroso, estamos sufriendo por eso y nadie debe de pasar por eso, la reforma migratoria podría poner fin a estas situaciones injustas”, relató Mireya Orozco, reina de la Federación de Clubes del Sur de California.

Mireya lamentó que la separación fue aún más dolorosa debido a que su madre estaba a punto de arreglar su situación migratoria y obtener la ciudadanía, pero debido a que faltó un día a la corte la recogieron en casa.

Las reinas de los clubes migrantes esperan que su voz sea escuchada, en tanto, durante esta semana recorrerán municipios con acompañamiento de funcionarios de Gobierno del Estado para que conozcan sus raíces.

“Esperamos que lo que aquí dijimos en el congreso local tenga eco y el Gobierno de México haga lo que tiene que hacer, sobre todo, generando empleos bien pagados para que la gente ya no tenga que emigrar” deseó Sofía, otra joven oriunda de Jerez y radicada en Chicago