Georgina Montalvo

Agencia Reforma

Como las bufandas y los guantes, el ponche de frutas es un elemento básico de esta temporada. La combinación de sus ingredientes resulta un buen protector contra las enfermedades respiratorias que están al acecho en el invierno.

“Al ponche lo consideramos como una fuente de vitamina C por la guayaba, el tejocote, la manzana y la ciruela pasa que los lleva en grandes cantidades.

“Todas esas frutas nos ayudan a mantener y reforzar nuestro sistema inmunológico y tener una protección extra en la temporada navideña, cuando las temperaturas son más bajas”, explicó Jimena Monroy Gómez, nutrióloga del Centro de Orientación Alimentaria (COA) Nutrición.

Beber un taza de la bebida en las tradicionales posadas, en la Nochebuena o en último día del año no debe preocupar a quienes ponen mucha atención en el consumo de calorías, aseguró la nutrióloga.

“Sí es una bebida dulce, pero el piloncillo es endulzante natural y finalmente el consumo del azúcar es problemático cuando se trata de productos industrializados, que tienen azúcar refinada en cantidades elevadas.

“Además, como su consumo es temporal, no es dañino para la salud por su dulzura y sí debemos aprovechar sus propiedades nutricionales porque que provee de antioxidantes, vitamina A, vitamina C, zinc y un poco de complejo B, todo en conjunto nos ayuda a fortalecer nuestro sistema inmune”, insistió Monroy Gómez.

Para limitar el consumo de azúcar, la opción es que si se sabe que se consumirá ponche, el resto del día se beban líquidos lo más naturales posible, no refresco o jugos.

En orden

Para lograr los mayores beneficios de las frutas del ponche, la nutrióloga del COA recomienda empezar por lavar adecuadamente todas las frutas, después cortarlas en trozos no tan pequeños y de preferencia permitir que el tejocote y la manzana conserven su cáscara.

“Hay que recordar que al cocer las frutas éstas corren el riesgo de perder un poco su textura, por lo que para mantener lo más posible la composición de la fibra de la fruta hay que introducir primero las más duras y al final las más blandas”, recomendó.

El orden sugerido es: agregar la caña, y luego el tejocote y la manzana, y al final la guayaba y la ciruela pasa.

“La naturaleza no se equivoca y los alimentos de temporada son los alimentos que el cuerpo necesita, y para el invierno, el ideal es el ponche de frutas”, concluyó Monroy Gómez.