Para llenar la casa de alegría

Alejandra A. Reyes

Agencia Reforma

Darle al hogar un toque decorativo y personalizado resulta atractivo para celebrar esta temporada navideña. Desde colores tradicionales hasta modernas superficies son algunas interpretaciones que arquitectos y diseñadores apuestan para poner la casa muy ad hoc.

Esferas y reflejos

Para los arquitectos Érik Carranza y Sindy Martínez, esta época del año es una invitación a la reflexión. Por ello, en el plafón de un estudio suspendieron un detalle decorativo hecho con 174 esferas que reflejan y multiplican las imágenes de la superficie.

“El espacio es muy compacto, por lo que las esferas permiten verlo desde otro punto de vista, con escenarios distintos y rincones que quizás no se habían percibido antes”, explicó Martínez.

Estos elementos cristalinos se suspenden con hilos de nylon. Así, cuando el aire entra, se mueven y generan delicados sonidos que enriquecen la atmósfera y los sentidos.

“La intención fue que pareciera una nube que está flotando o una gran lámpara que con la luz genera reflexiones. Como el lugar es tan blanco, buscamos contrastar y el color rojo nos lo permitía. Al mismo tiempo, funcionaba para la intervención de la época navideña”, mencionó Carranza.

De esta manera, la distribución de las sillas, diseñadas también por ambos artífices, y una colchoneta, generan un área que invita a la meditación que acompaña a las fiestas de fin de año.

Festejo en el exterior

El color rojo y un ambiente semiformal distinguen la decoración que la arquitecta Lucía Zesati realizó en una terraza. A decir de la creativa, las atmósferas navideñas pueden resultar rígidas, por ello, creó un área acogedora.

“No se necesitan grandes ni costosos elementos para generar un ambiente con ‘sabor’ y colorido”, señaló Zesati. “Me gusta la ‘Navidad roja’, los diseños sencillos y que, de la puerta para adentro de la casa, se viva un espacio familiar”.

Para lograrlo, sobre una mesa colocó un mantel de cuadros bicolor y usó una vajilla blanca. Al centro, puso una corona con piñas de pino y ángeles.

Esta terraza se comunica con el jardín, en donde adecuó una superficie para un nacimiento tallado a mano. Además, en un muro que tiene integradas macetas de barro, adaptó nochebuenas que brindan un atractivo contraste.