Sólo amigos… y nada más

Staff Agencia Reforma

Salen juntos a todas partes, platican hasta altas horas de la madrugada, confían plenamente el uno en el otro… y sólo son amigos. Entonces, ¿es posible que un hombre y una mujer puedan tener una amistad sin ningún otro fin?

“La amistad entre géneros distintos puede darse sin ninguna connotación erótica y estar únicamente basada en el afecto. En diferentes circunstancias, es factible que suceda esto. Por ejemplo, aquellos que viven lejos pero tienen un vínculo importante y otros que crecieron juntos pero se ven con cierta frecuencia”, explica la terapeuta Adriana López.

“Desafortunadamente, no todas las personas piensan así, ya que en los tiempos actuales hay quienes aseguran que, si un hombre y una mujer se llevan bien, es porque tienen otro tipo de relación”.

De acuerdo con la especialista, compartir las vivencias y dificultades con alguien que las entiende y valora objetivamente, es una de las mayores ventajas de este tipo de amistad.

Sin embargo, en ciertas ocasiones, asegura López, la pareja puede ser una fuerte limitante para conservarla, ya que, si él o ella muestran celos, la relación amistosa podría fracturarse.

Para evitar lo anterior, es necesario hablar con sinceridad y compartir algunos detalles de la historia en común, como por ejemplo de cuando el amigo o amiga vivieron en la misma colonia o cuando eran compañeros de escuela.

También los novios pueden realizar actividades en el mismo círculo social con el fin de incrementar la confianza.

“La sociedad juega un papel importante para enjuiciar este tipo de relaciones, pero cada persona le da un valor diferente. Habrá algunos a quienes les importe mucho el qué dirán, pero para otros será más valiosa una amistad que la opinión ajena”, agrega López.

Más que un

confidente

Cuando el amigo o amiga procura tener mayor cercanía física o se enoja por comentarios sobre la pareja o el ex novio, puede ser que sienta más que un cariño amistoso.

“Hay insinuaciones que suelen ser muy obvias. Sólo hay que poner atención para darse cuenta. Si esto sucede, lo mejor es hablarlo para dejar las cosas en claro”, dice la terapeuta.

“En estos casos, la comunicación sincera y honesta es el principal ingrediente. Es necesario poner las cartas sobre la mesa y no rebasar los límites”.

Mi ex novio…

¿mi amigo?

De acuerdo con López, en ciertas circunstancias, los ex novios sí pueden convertirse en amigos.

Si las condiciones en las que terminaron la relación fueron positivas, es probable que exista una amistad.

En algunos casos, hay personas que quedan muy dolidas después de la ruptura y pasan años para poder volver a hablar con la ex pareja.

En todas las situaciones es importante vivir el duelo y cerrar el ciclo antes de buscar reiniciar o terminar la relación.