Una Navidad con sentido

Adolfo Córdova

(Agencia Reforma)

La magia de la Navidad puede llegar a pequeños y grandes con una reunión para convivir en familia. Los preparativos, con tanto adorno y tanto arreglo personal, tienen que resultar en una Nochebuena inolvidable.

Si usted va a ser el anfitrión, empiece por generar una atmósfera que estimule todos los sentidos.

Los elementos propios de la decoración navideña llevan en sí mismos un toque acogedor, sólo complemente la experiencia con luz de velas y focos de bajo voltaje.

Recuerde que aunque sea el anfitrión de la fiesta, lo importante es disfrutar, así que lo mejor es optar por preparaciones sencillas, tanto de bocadillos como cocteles, para que no se esclavice en la cocina.

Si lo que busca es disfrutar de una animada fiesta decembrina, en la que no sólo sea el anfitrión sino que además actúe como invitado, lo mejor es optar por unas alegres preparaciones hechas con licores, mezcladores y algunas frutas acompañadas de bocadillos hechos en casa, para que cada quien se sirva.

Para garantizar que su fiesta sea todo un éxito, la mejor recomendación es conceptualizarla en torno a un tema que le permita definir los colores que usará en la decoración, los accesorios, el tipo de platos, las copas y las servilletas.

Una buena reunión no sólo está determinada por los platillos y las bebidas; no descuide aspectos de decoración, como un atractivo centro de mesa, unas copas decoradas y un ambiente animado.

Los bocadillos que elija le deben permitir utilizar ingredientes que comúnmente tenga en casa, como pollo, pescados, carnes y embutidos para disminuir el costo del súper, además de algunas frutas y verduras de temporada que seguramente encontrará a buen precio.

En cuanto a las bebidas, el único límite es su imaginación, ya que los mezcladores, los licores y las distintas copas serán cómplices ideales para una divertida fiesta.

Algunos de estos cocteles puede prepararlos en grandes cantidades y refrigerarlos, para que los sirva por porciones sin tener que pasar toda la noche elaborándolos, y también puede optar por bebidas hechas a base de frutas para quienes no son muy amigos de las copas.

Sin embargo, no pierda de vista la cantidad de invitados que espera para que prepare suficiente comida y bebida, garantizando así que nadie se quede con el antojo.

Motívese a invitar a sus amigos a casa festejar esta época con una deliciosa selección de comida y bebida que le permita festejar con los suyos la llegada del 2010, sin atarse a la cocina y a las preparaciones complicadas.

Organice su cena

¿Dos tenedores?, ¿cuántas copas?, ¿para qué sirve esta cuchara? Cuando se va a realizar una cena en casa, éstas y más preguntas dan vuelta en la cabeza.

Ahora que empieza una temporada de compromisos con amigos y familiares, es preciso saber cuál es el correcto montaje de una mesa formal.

Se trata de una labor sencilla en la que el menú que se va a servir dicta en dónde se colocan los cubiertos, copas y accesorios.

Cuide las reglas

Tanto como anfitrión como comensal, en la mesa hay normas estrictas que es deseable seguir para lograr una grata celebración.

Es importante que la mesa esté dispuesta antes de que lleguen los invitados.

La utilización correcta del espacio propiciará mayor comodidad, hay que respetar el vacío entre cada comensal, y no convertir una mesa para 8 personas en una para 10 o 12.

Los adornos de la mesa deben ser pocos y bajos para que permitan la circulación de los alimentos que se dispongan al centro, es básico que no obstaculicen la vista de los invitados, ya que de lo contrario inhibiría la interacción, A la hora de comer, los cubiertos se utilizan de la parte externa a la interna, este detalle es invariable.

Al terminar el plato, los cubiertos se colocan sobre él, pero nunca cruzados. Lo mismo sucede con el postre y si éste se sirvió en una copa, la cuchara se deja en el plato que apoya la copa.