Quedan a deber los ‘observados’

Luis Homero Echeverría

Agencia Reforma

PHOENIX, EU .- La presión se comió a los jugadores “a prueba” en el Tricolor.

Si bien el técnico Miguel Herrera intentó no forzar a sus jugadores al decir que en un partido no se jugarían el pase al Mundial, resultó ineludible para Marco Fabián, Rogelio Chávez y Jesús Zavala salir a la cancha como con kilos de piedras en sus pantaloncillos.

Los tres elementos mostraron una velocidad y ritmo distintos al de jugadores como Miguel Layún, Isaac Brizuela y Carlos Peña, que tal vez no hicieron mucho a la ofensiva en cuestión de creatividad, pero mantuvieron la rapidez que exige el sistema del “Piojo”.

Chávez no generó salida por el costado derecho y permitió los acercamientos de Estados Unidos por su corredor, además de fallar en el marcaje para el primer tanto del rival.

Zavala quedó atrás en la marca sobre Michael Bradley en el primer gol del encuentro, además de sufrir con los cambios de juego que dirigió Brad Davis para el equipo anfitrión.

Fabián no sólo no se apegó a sus funciones de segundo atacante, se perdió en tres cuartos de cancha en su tendencia a ser enganche, no funcionó como poste para los laterales, no buscó sus típicos disparos de media distancia y tampoco presionó la salida de los adversarios.

Otros hombres a examen también mostraron sus bemoles. Juan Carlos Valenzuela se volvió un espectador en las jugadas de los dos primeros goles de Estados Unidos y exageró en su intento de acarreos, en lugar de tocar de forma rápida ante el acoso de los marcadores estadounidenses.

El portero Moisés Muñoz, quien también busca su lugar para el Mundial, poco pudo hacer en las anotaciones del rival. Lo suplió Alfredo Talavera, quien mostró mayor seguridad en las jugadas aéreas.