CARTAGENA, Colombia (AP)
La lógica se cumplió, pero los cuatro favoritos que completaron el cuadro de equipos en los cuartos de final del Mundial Sub20 debieron sufrir.
Brasil fue el único que sacó un resultado holgado, un 3-0 sobre Arabia Saudí que fue labrado con goles en el segundo tiempo, y será el rival de España en el partido que por lejos acaparará la atención de la próxima ronda.
Nadie creyó que Corea del Sur le iba a plantear tanta resistencia a España, que tuvo que irse a una definición por penales para imponerse 7-6 sobre el equipo asiático tras un empate sin goles en el tiempo reglamentario y la prórroga.
Nigeria y Francia sacaron sus boletos con idénticos triunfos 1-0 ante Inglaterra y Ecuador, respectivamente.
La ronda de los ochos mejores arrancará el sábado con los duelos Argentina-Portugal en Cartagena y México-Colombia en Bogotá. Al día siguiente, el Brasil-España se disputará en Pereira, en tanto que el Francia-Nigeria se jugará en Cali.
El partido entre brasileños y españoles tendrá todos los componentes de una final anticipada al toparse dos de los principales favoritos.
“Son dos selecciones con calidad y llegarán al partido con igual responsabilidad”, dijo el técnico brasileño Ney Franco. “Eso podría hacer el partido más interesante y de mejor calidad técnica”.
“Vamos a estar ante un equipo con tradición y que es actualmente el campeón mundial de mayores”, añadió Franco.
Después de una dura resistencia saudí, Brasil logró imponer su potencia y calidad en Barranquilla con los goles de Henrique (46 minutos), Gabriel Silva (69) y Dudu (86).
España caminó por la cornisa ante Corea del Sur y salvó el pellejo al tener mejor suerte en los penales, una tanda que se inclinó a su favor cuando Kyung Jung Kim disparó a las nubes su remate.
En Cartagena, un polémico tanto de Antoine Griezmann (75) le dio la victoria a Francia sobre Ecuador, que reclamó una posición adelantada en la jugada del gol.
“Todo el trabajo de cuatro años se refleja en una falla arbitral”, reprochó el técnico ecuatoriano Sixto Vizueta.
La nota curiosa se dio a los 27 minutos del duelo, cuando las torres de alumbrado del estadio de la ciudad se apagaron y provocaron una pausa de unos diez minutos debido a la oscuridad.
Finalmente apareció un equipo capaz de hacerle un gol a Inglaterra y ese fue Nigeria. Los ingleses habían avanzado a octavos con tres empates sin goles, pero Eafe Egbadi (52) acabó con el encanto y los mandó a casa.
