¿Ejercicio? No te aceleres

PALOMA VILLANUEVA

Agencia Reforma

Activar el cuerpo no sólo es una recomendación de los médicos para bajar los altos índices de obesidad que aquejan a nuestro País, se trata de una necesidad ante el sedentarismo que, de acuerdo con expertos en actividad física, es la razón de que desarrollemos enfermedades crónicas que pueden arrebatarnos la vida.

Existe evidencia científica sobre la multiplicidad de beneficios para la salud física y mental que provee el ejercicio, sin embargo, luego de llevar una vida sedentaria por años, la activación física puede ser difícil para algunos.

Médicos aclaran que en principio no es necesario inscribirse al gimnasio o salir a correr todos los días, de hecho señalan que la activación física debe ser parte de una nueva mentalidad de movimiento aplicada a nuestras actividades cotidianas.

Paso a paso

John Duperly, especialista en medicina interna y representante para América Latina del programa Ejercicio es Medicina del Colegio Americano de Medicina del Deporte, explica en entrevista que el primer paso está compuesto por pequeñas acciones.

“Empezar a utilizar el transporte masivo en vez del automóvil, subir las escaleras en vez de usar el ascensor, estacionar el carro más lejos, ponerse de pie al recibir una llamada y aprovechar cada oportunidad que tenga para hacer un poquito de actividad física”, enlista.

Otra recomendación importante es combatir el tiempo que pasamos sentados, por lo que el médico recomienda levantarse por lo menos cinco minutos por cada hora que permanezcamos sentados.

Una vez que las personas empiezan a cambiar sus hábitos sedentarios inmediatamente aparecen los beneficios en el estado de ánimo, en las horas y la calidad del sueño y en el estado físico, asegura.

El segundo paso es iniciar con un ejercicio específico, como la caminata.

Víctor Keihan Rodríguez, ortopedista y traumatólogo de medicina del deporte, apunta en entrevista que para permanecer sanos debemos realizar por lo menos 30 minutos de actividad física al día pero que no necesariamente debe ser actividad intensa y continua.

“Pueden hacer dos sesiones de 15 minutos o incluso en tres sesiones de 10 minutos porque los efectos para la salud son los mismos”, explica.

Además, si no estamos acostumbrados a hacer ejercicio podemos empezar a acostumbrar a nuestro cuerpo poco a poco.

“Lo que recomendamos es que para llegar a los 30 minutos de actividad física que se necesitan al día, se puede empezar por hacer 10 minutos hoy, mañana llegar a 15 minutos, el día siguiente a 20 y así hasta que tu cuerpo se acostumbre a hacer los 30 minutos”, agrega el especialista.

El segundo paso, coinciden los expertos, es caminar.

“A las personas que no hacen ningún ejercicio se les recomienda que comiencen a caminar, que busquen sitios agradables, que vayan oyendo música y aprovechen para hablar por teléfono, tal vez para resolver algún problema de trabajo”, dice Duperly.

Una vez que el cuerpo se acostumbra y que empezamos a sentirnos mejor, agrega, la consecuencia natural es que busquemos algo aún más interesante.

En esta etapa Keihan propone el baile como una propuesta especialmente atractiva para los latinos de todas las edades.

“Bailar es una propuesta muy buena porque se puede hacer en la casa, puede hacerse en grupo, en pareja, solo o con amigos; y lo importante es que une dos cosas que son actividad física y placer, y ese el secreto de un cambio de comportamiento a largo plazo, el placer”, afirma.

Las modalidades deportivas como la natación, el ciclismo, las artes marciales y el futbol son otras opciones que mencionan los especialistas y recomiendan que para garantizar que se convierta en un hábito deben cumplir con dos requisitos indispensables; que nos guste y que sea viable.

¿Y si no funciona?

El tiempo, la falta de costumbre y poca motivación pueden ser tres factores mortales para este nuevo estilo de vida, pero los expertos señalan que hay distintas maneras de evitar que el ejercicio nos aburra.

Duperly aconseja identificar cuáles son los problemas que nos impiden disfrutar plenamente del ejercicio y resolverlos.

El ejercicio en general produce placer, agrega el especialista, y si esto no pasa las razones más comunes son que lo hacemos en horarios que no nos gustan o que no se adecuan a nuestra rutina, que no usamos los implementos adecuados o que la modalidad del deporte que escogimos no es mejor para nuestra personalidad.

Por otro lado, Keihan recomienda buscar un compañero de ejercicio que pueda motivarnos en los días difíciles y si se trata de caminatas agrega que lo mejor es cambiar las rutas para tener experiencias distintas.

Los médicos coinciden en que los pequeños cambios de comportamiento se traducen en grandes diferencias en los índices de salud pública.