Adán García

Agencia Reforma

Autoridades federales y estatales acordaron no dar más tregua a la presencia de autodefensas o civiles armados en Michoacán.

Al considerar que el cártel de Los Caballeros Templarios ha sido desmantelado y reducidos los niveles de criminalidad, luego de un año con dos meses de iniciada la estrategia federal de seguridad en el estado, argumentaron que las autodefensas ya no tienen sustento.

“Las autoridades federales y estatales determinaron, junto con los mandos militares, que a partir de este día los civiles que porten armas al margen de la ley serán puestos a disposición de las autoridades correspondientes”, informó la Administración del Gobernador Salvador Jara.

El acuerdo fue tomado durante una reunión del Grupo de Coordinación Michoacán, realizada el martes en la ciudad de Lázaro Cárdenas.

“Coincidieron en que una vez que ha sido desarticulada la estructura operativa del grupo delictivo hegemónico en el estado, los argumentos que motivaron a los civiles a tomar las armas para velar por la seguridad de sus pueblos han quedado rebasados y no hay sustento que legitime su presencia”, señala el documento elaborado al final del encuentro. En la reunión participaron representantes del Ejército, Policía Federal, Marina y de corporaciones estatales, así como de la sociedad civil, Iglesia y académicos.

Según los acuerdos difundidos por el Gobierno michoacano, ahí se determinó que la incidencia de delitos de alto impacto ha tenido una reducción significativa en el estado.