Cirenia Chávez

Agencia Reforma

“Se ha encontrado que la probabilidad de que un adulto siga teniendo el déficit de atencion es tan alta como de un 55 a 75 por ciento”, dice David Saucedo Martínez, psiquiatra.

En el País, informa el especialista que este desorden afecta a un 4.4 por ciento de adultos.

El trastorno por déficit de atención (TDA) es una condición caracterizada por la presencia de conductas relacionadas con la dificultad para concentrarse. Existen tres tipos: el inatento, el hiperactivo-impulsivo y el combinado.

En el primero predomina el déficit de atención, mientras que en el segundo se presentan problemas para retener la atención en conjunto con un comportamiento hiperactivo-impulsivo.

En su forma combinada, el trastorno es una mezcla de los primeros dos tipos, indica.

Aunque el déficit de atención se presenta en ambos sexos, hay más casos de hombres que lo presentan en su dimensión hiperactiva-impulsiva, mientras que en las mujeres predomina la inatención. Es un problema que por lo general viene acompañado de otros síntomas como depresión, ansiedad y abuso de sustancias, agrega.

Otros pueden presentar trastornos de la conducta como dificultades con figuras de autoridad o personalidad antisocial.

En general, la combinación de varios diagnósticos es más la regla que la excepción, dice el psiquiatra.

Los adultos afectados por cualquiera de las formas del trastorno lo tuvieron que haber padecido de niños, pero los síntomas a una edad adulta son diferentes y varían según el tipo que se presenta.

Para detectarlo se ha sugerido el concepto de “hyperfocus” (en inglés).

Éste describe que la hiperactividad o inatención pueden ser sustituidas en adultos por conductas de excesiva concentración en una sola actividad o tarea, como por ejemplo atender sólo a la computadora e ignorar estímulos a su alrededor.

Aunque ésta es una forma en la que una persona se adapta a su problema de interactuar con otros, explica Saucedo Martínez que los síntomas se pueden dividir en tres niveles según la forma del trastorno que se presenta.

Los adultos con hiperactividad pueden ser inquietos, cambian frecuentemente de posición, tienen problemas para esperar, y por lo general se sienten más cómodos haciendo actividades que requieren movimiento.

Hablan mucho, son locuaces y es difícil mantener una conversación con ellos, agrega.

Los adultos con problemas de atención pueden presentar síntomas como dejar actividades empezadas y dificultad para seguir instrucciones.

Frecuentemente cometen errores y suelen dejar de lado tareas importantes por indecisión.

Informa el psiquiatra que la enfermedad está relacionada claramente con factores genéticos.

En niños

El TDAH se presenta del 5 al 7 por ciento de niños y jóvenes de 6 a 16 años en Latinoamérica, informa Leticia Flores Trejo, pediatra de Doctors Hospital.

Antes, a quienes presentaban síntomas como inatención, hiperactividad e impulsividad, la tendencia era catalogarlos como niños problema, dice.

Hoy en día se sabe que se trata de un trastorno que se manifiesta a través de estos tres comportamientos.

“Se sospecha en niños que los papás y sus maestros ven que no terminan sus actividades, que les cuesta mucho trabajo terminar una tarea, que se rehúsan o le sacan la vuelta a realizar trabajos de gran rigor intelectual”, dice.

Padres que ven un niño hiperactivo que interrumpe, hace mucho ruido o tiene comportamientos de inatención, se para continuamente y se distrae, deben estar atentos ya que éstos representan una serie de problemas asociados con el déficit.

Uno de los criterios más importantes es que las manifestaciones hayan empezado antes de los 7 años de edad, señala.

Algunos niños con TDAH son muy brillantes, pero por el trastorno presentan un riesgo de fracaso escolar.

Es común que el trastorno se manifieste de manera conjunta con otros padecimientos, dice Flores Trejo.

Aunque se presenta en niños y niñas, es más frecuente en el sexo masculino.