Jorge Rivera

La Raza del Noroeste

Considerado uno de los entrenadores mexicanos más notables de los últimos años, Carlos de los Cobos llenó titulares el año antepasado dirigiendo a una disciplinada y luchadora selección de El Salvador, que presentó batalla en las eliminatorias al mundial de Sudáfrica y se metió en el hexagonal final.

De los Cobos habría posiblemente podido conseguir “chamba” con cualquier selección en centro américa e incluso posiblemente con algunas en Suramérica, cuando la ola post mundialista tumbó y subió técnicos, pero él no quiso esperar.

Tampoco quiso volverse a meter a la tómbola de la liga mexicana, donde los dueños le dan trabajo primero y “cuello” después a un grupo casi cerrado de estrategas que brincan como pelotas de club en club.

En cambio, el jalisciense decidió subirse a un caballo más bravo, el de dirigir a un equipo donde casi nadie habla su idioma, siendo que a él eso del “English” tampoco le viene a modo.

¿Cómo hará para que le hagan caso? nos preguntamos muchos.

De los Cobos pasó el 2010 tratando de aprender el oficio de dirigir un plantel con menos talento y más diferencias culturales y lingüísticas de las que nunca tuvo.

No le fue bien porque quedó fuera de la liguilla, poco le ayudaron los fracasados traspasos de los temperamentales Nery Castillo y Freddy Ljungberg, ninguno de los cuales produjo ni duro mucho; pero recibió un segundo año, posiblemente el de “matar o morir”.

Entonces, Carlos de los Cobos entró en el 2011 a buscar un plantel más efectivo y sobre el cuál el pueda tener más control, y ojala más éxito.

La respuesta oriental

Castillo y Ljunberg son muestras de la preocupación central en Chicago, la falta de talento ofensivo, que de paso se agravó con el retiro del legendario Brian Mc Bride, y para buscar goles, el entrenador y los directivos fueron lejos, literalmente a donde se acaba nuestro continente, la República Oriental del Paraguay.

Hace un año no había ningún uruguayo jugando en la MLS, pero la llegada a Seattle del “Flaco” Álvaro Fernández, pareció abrir los ojos de los jugadores, y promotores, de uno de los países que más exporta jugadores de fútbol en el mundo, y cinco “charrúas” siguieron al volante de Seattle.

Los de Chicago son dos, y ambos juegan adelante; si se puede concluir de los primeros dos juegos, las cosa vá por buen camino, el Fire ha anotado cuatro goles y tres de ellos han sido de uno de los orientales.

¿quienes son?

Gastón Puerari es un delantero de 25 años que jugó sus primeros tres con el Rampla Juniors y los últimos dos con el Montevideo Wanderers, ambos de la Primera División uruguaya, no tiene un historial muy brillante, pero llega con la experiencia de una de las ligas de Primera más antiguas del planeta.

Diego Chávez es tambien delantero y de lejos más conocido que su paisano, también de 25 años, Chaves vió acción con los Gallos del Querétaro en el 2009 y 2010 antes de pasar al Veracruz de Cuauhtémoc Blanco.

El cerebro detrás de esta “invasión” es también uruguayo, se llama Leo Percovich, fué portero en los 90s y ha sido asistente técnico de muchos equipos por todo el mundo, desde el Real Madrid en España hasta el Pachuca en México, y ahora es el asistente principal de De los Cobos.

A esa fórmula altamente latina del Fire 2011 se suma el guatemalteco Marco Pappa, el más conocido de los nuestros entre los rojos de la ciudad del viento.

Sounders

sin Montero

Por el lado del equipo de casa, la novedad nuevamente será la ausencia de Fredy Montero, quien tampoco estuvo en el empate 2-2 del equipo en San José, contra los Terremotos de esa ciudad.

Montero sufrió fractura en una muñeca, durante el segundo partido del año contra Red Bull, y tuvo que ser operado la semana pasada, el técnico de Sounders dijo el jueves que el “Matador” posiblemente no la hace para el sábado.

“La posibilidad de que juegue es poco, aún está inflamada (la muñeca), y quieren asegurarse que no se infecte la herida”, afirmó el entrenador del verde radiante.

“Ha entrenado un poquito, pero a menos que ocurra una recuperación milagrosa no lo veremos”, añadió.

Al que seguramente sí veremos y muy posiblemente de titular es al argentino Rosales, a quien los medios en inglés han “adoptado” de estrella por estos días.

Rosales dio de qué hablar con sus movimientos para el primer gol de Sounders contra San José, donde engañó la defensa con un rápido movimiento lateral, ganó la raya y centró preciso para que Brad Evans no más la empujara,

Sounders irá por su primera victoria en una día al parecer soleado, frente a un equipo de viene de descansar y trae pólvora nueva, desde la tierra del mate.