Félix Zapata

Agencia Reforma

La Copa MX le brilla en los ojos a los futbolistas formados en equipos mexicanos.

Con la invasión de extranjeros y naturalizados a la Liga, el torneo copero que arranca hoy en su edición Clausura 2015 aparece como la oportunidad de oro para que se muestren jugadores nacionales y jóvenes.

De los 165 futbolistas que tuvieron actividad el fin de semana, en la Jornada 2, poco más de la tercera parte fueron no nacidos en México, ya sea extranjeros, naturalizados o que nacieron fuera del País.

De los 62 foráneos que vieron acción, 18 son naturalizados y cinco llegaron al balompié local con la doble nacionalidad.

El Puebla, uno de los primeros tres clubes en abrir fuego en la competencia copera, alineó ocho jugadores con estas condiciones, de los 14 que enfrentaron al Veracruz.

Tan solo en el once titular de La Franja aparecieron los extranjeros Facundo Erpen (Argentina), Matías Alustiza (Argentina) y Jhon Pajoy (Colombia); los naturalizados Eisner Loboa, Luis Gabriel Rey y Mauricio Romero; además de los mexico-estadounidenses Hérculez Gómez y Michael Orozco.

Por eso el cotejo de los Camoteros ante el Atlante se presenta como la ocasión perfecta para que tengan minutos futbolistas como Sergio Pérez y Francisco Torres, quienes se quedaron en la banca.

En otro caso, Monterrey, que recibirá hoy al Correcaminos, le dio minutos de juego a hasta siete foráneos de los 14 que utilizó el técnico Carlos Barra: los extranjeros Stefan Medina, Dorlan Pabón, Yimmi Chara, Alexander Mejía y Edwin Cardona; además de los naturalizados Neri Cardozo y Lucas Silva.

Para el duelo de Rayados ante el conjunto de la UAT bien podrían aparecer hombres como Darvin Chávez, Efraín Juárez y Omar Arellano.

Así que la Copa MX, que da medio boleto para la Copa Libertadores 2016, se convierte en una puerta abierta para que los mexicanos que no pudieron tener lugar por los no nacidos en el País, luchen por ser titulares en la Liga.