Osorio: “Fue una vergüenza”

Por Édgar Contreras

Agencia Reforma

“Mis más sinceras disculpas a la afición mexicana”, comentó Osorio. “Lo de hoy fue una vergüenza, un accidente del futbol. Fue una presentación muy pobre. Mil disculpas a toda la afición. “Me equivoqué en todo, asumo esa responsabilidad. “Estoy tratando de digerir esta derrota y ya pensaré lo que hay qué hacer”, dijo. El estratega del Tri aceptó que jugaron horrible y que no vio a sus jugadores al nivel. “Ninguno de nuestros jugadores estuvo con potencial. “Habrá que respetar las opiniones y asumir la derrota. Es responsabilidad mía”, declaró

Voltean el grito sobre Ochoa

Y el grito de “puto” fue dedicado para… ¡Guillermo Ochoa! La afición mexicana canalizó su frustración dándole la espalda al Tricolor, coreándole “oles”, burlándose de su propio guardameta y dejando en paz, por fin, al rival. Al minuto 59 la gente, que abarrotó el Estadio Levi’s, buscó la salida. Empezaron a vaciarse las butacas.

Asistieron 70 mil a la masacre

70 mil 547 aficionados, récord para un partido de futbol en el inmueble. Cuando Chile marcó el cuarto gol, de Eduardo Vargas -quien hizo cuatro tantos-, la gente lanzó de todo. Era demasiado. Tras el séptimo gol hubo un espontáneo que intentó invadir la cancha, quién sabe si para detener la paliza, agredir a un mexicano o para celebrar con los chilenos. Y el árbitro pitó al 90’ por pura piedad. Ya no era necesario agregar minutos. México tenía mucho tiempo fuera de la cancha. Camino al vestidor, esa gente que bañó a los chilenos, despidió de la misma forma a cada uno de los jugadores mexicanos que, cabizbajos, se fueron a las regaderas ya sin espíritu.