Seattle quiere reinar otra vez en el Oeste

TIM BOOTH,

Associated Press

SEATTLE, Washington, EE.UU. (AP) Olviden que alguna vez fue la peor de la liga. El año pasado se demostró que la División Oeste de la Conferencia Nacional es la más poderosa de la NFL.

Ya sea que San Francisco y Seattle, la rivalidad más enconada de la liga, se enfrenten en el juego de campeonato de la conferencia, o que los Seahawks logren la victoria con mayor margen en un Súper Bowl en 20 años al apalear a Denver, el perfil de esta división es totalmente distinto del que tenía hace pocos años.

La fortaleza del Oeste de la Nacional va más allá de los Seahawks. La marca combinada de los cuatro equipos hace un año fue de 42-22, la mejor de cualquier división y esta temporada podría ser igual de buena.

Todos los equipos tienen preocupaciones en 2014. San Luis debe descubrir si Sam Bradford puede mantenerse sano. Arizona debe remplazar a los linebackers Daryl Washington y Karlos Dansby, así como el tacle defensivo Darnell Dockett. San Francisco no contará con su linebacker estelar NaVorro Bowman por, al menos, media campaña.

Y Seattle debe manejar la atención y escrutinio que provoca ser el campeón defensor. “Son buenos, son los campeones defensores. Están en nuestra división y hay mucha motivación en eso”, dijo Justin Smith, de San Francisco. Aspectos a observar en la división:

CORONA DE ESPINAS:

Seattle nunca había sido campeón, pero Pete Carroll, su entrenador, sí.

Su plan para mantener a los Seahawks en lo más alto incluía asegurar con extensiones contractuales al cornerback Richard Sherman y al safety

Earl Thomas, los mejores en sus posiciones en la liga, así como al receiver Doug Baldwin, recontratar al defensive end Michael Bennett, y olvidarse de lo que sucedió la campaña pasada. Los Seahawks también evitaron una disputa laboral con el running back Marshawn Lynch y han visto destellos del impacto que un saludable wide receiver Percy Harvin podría tener en su ataque.

Quizá su defensa no tenga las estadísticas impresionantes que logró el año pasado, pero si el quarterback Russell Wilson y el ataque siguen evolucionando los Seahawks tal vez no necesiten la mejor defensa para mantener en la cima de la división. “Si vas a tener un buen equipo tienes que manejar a estos tipos y estos buenos equipos, eso es a lo que nos enfrentamos”, dijo Carroll.

ÚLTIMA SALIDA:

Los 49ers se mudaron a su nueva sede, palaciega, el estadio Levi’s— y dejaron el anticuado Candlestick, y tratan de recuperar su sitio como los mejores del grupo.

El quarterback Colin Kaepernick firmó un contrato de varios años y contará con el tight end Vernon Davis, los receivers Michael Crabtree, Anquan Boldin y Stevie Johnson como sus objetivos durante toda la campaña. Frank Gore y el novato Carlos Hyde se encargarán del trabajo por tierra de un ataque que puede basarse en los acarreos.

Hay mayores preocupaciones en la defensa. La secundaria ha sido totalmente renovada desde que los 49ers jugaron en el Súper Bowl, hace dos temporadas. Bowman seguramente no regresará hasta media campaña, si todo va bien, tras la terrible lesión en la rodilla que sufrió en el campeonato de la Conferencia Nacional y se desconoce si el linebacker Aldon Smith será sancionado por sus problemas fuera del campo.

EL MÁS ADMIRADO:

La defensa que Jeff Fisher ha armado en San Luis es impresionante. Que los Rams aspiren al título depende del brazo de Bradford.

Su condición como el quarterback franquicia de San Luis sigue siendo debatida en el último año de vigencia del contrato que firmó como novato. A principios del año pasado mejoró al completar 61% de sus pases y lanzar 14 touchdowns pero una lesión en la rodilla acabó con su temporada luego de siete partidos. Los Rams contrataron a Kenny Britt para que Bradford tenga otro receptor y la adición del novato Greg Robinson debe fortalecer la línea ofensiva.

“Cada año se trata de hacerla o perderla, según algunos”, dijo Bradford.

GRAN OLA:

Arizona fue uno de los equipos más dinámicos de la campaña pasada por el impacto del entrenador Bruce Arians, y ganó siete de los últimos nueve partidos. Los Cardinals tienen la distinción de ser el único equipo que ha ganado en casa a Seattle desde 2011 al vencer a los Seahawks en la 16ta semana.

El quarterback Carson Palmer tiene ya más conocimiento del sistema de Arians y Larry Fitzgerald sigue siendo un receptor de élite. Andre Ellington se reveló como el líder acarreador de Arizona al conseguir 652 yardas y tres touchdowns corriendo en su año de novato.

Pero los Cardinals tienen problemas para encontrar a los suplentes de Dansby y Washington, mientras que Dockett se lastimó la rodilla y eso puede ser una pérdida grave. La secundaria es la segunda mejor en la Conferencia Nacional después de Seattle gracias al cornerback Patrick Peterson, a quien se sumarán Antonio Cromartie y el novato Deone Bucannon.

“Me gustó la forma en que el equipo peleó durante la segunda mitad de la campaña”, dijo Arians. “Hace que esta sea más importante, pero también más fácil en su inicio”.

El pronóstico para la división, del 1 al 4: Seahawks; 49ers; Rams; Cardinals.