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Un frenesí de goles en los últimos 10 minutos del partido marcó el clímax de las emociones del primer enfrentamiento oficial como cuadros MLS de los Seattle Sounders y los Vancouver Whitecaps, que se llevó a cabo la noche del sábado en Qwest Field.

Sounders, que caía 1-0 faltando 10 minutos para el final, anotó dos goles latinos en las piernas de Mauro Rosales y Osvaldo Alonso, pero una falla defensiva permitió un espectacular remate de primera intención del francés Eric Hassli, desde ya candidato a gol del año en la MLS 2011, para sellar el empate 2-2.

“Fue una montaña rusa” dijo el técnico de Sounders Sigi Schmid resumiendo los minutos finales del juego.

A pesar de perder dos puntos más de local, Sounders permanece tercero en la Conferencia Oeste de la MLS, aunque igualado con Colorado que es cuarto con un juego menos, y solo un punto delante del Real Salt Lake que tiene cuatro partidos pendientes.

El partido.

Al minuto tres Vancouver realizó el primer tiro libre del partido, los Whitecaps probaron llegar al arco contrario y romper la barrera defensiva del equipo local, pero Parke y Hurtado se lo impidieron protegiendo uno y otro costado.

El mejor remate de Sounders en el primer tiempo lo hizo Osvaldo Alonso a los 18, cuando recibió un despeje del portero Cannon tras un tiro de esquina y remató de media distancia obligando a volar de nuevo al meta, para salvar al tiro de esquina.

Al minuto 27 del encuentro un pelotazo por la izquierda fue recibido por el brasileño Camilo, quien entró al área driblando y dejando en el camino a James Riley antes de tocar el pie de Alonso, que llegaba al relevo, y caer aparatosamente; el árbitro declaró un penalti que Sounders reclamó de manera efusiva.

“No pude hablarle al árbitro porque tenía miedo de hablarme y salió afanoso del campo; lo busqué en el medio tiempo y al final del partido y ambas veces se escabulló; luego obviamente tuvo que estarse sintiendo mal”, aseveró Schmid al final del juego.

El francés Hassli anotó el 1-0 sin problema y desde ese momento Sounders buscó el empate con denuedo.

Montero intento en varias ocasiones la anotación pero no lo consiguió: una de las jugadas más claras fue de Mike Fucito al minuto 43 de juego, cuando midió fuerza con la defensa del equipo Canadiense con un potente tiro, sin consecuencias; así termino el primer tiempo del encuentro.

Segundo Tiempo

La segunda mitad del partido se inició con una falta al jugador Jeb Brovsky de Vancouver, donde se marcó tiro libre y fue a parar en una jugada de contragolpe que Sounders no pudo aprovechar.

Rosales era quien más fútbol generaba por los verdes, y estuvo cerca de pasar la primera anotación de Seattle para igualar el marcador cuando centró de tiro de esquina y Hurtado cabeceo el balón, pero fue a parar a las manos del guardameta Canadiense.

A los 20 del segundo tiempo Sigi Schmid dio oportunidad de ingreso al colombiano Miguel Montaño, quien ha tenido buen nivel en el equipo de reservas; Montaño reemplazó a Fucito y pareció ayudar a que Sounders abriera más la cancha con su juego por izquierda.

Al minuto 80 los fanáticos de Sounders gritaron el primer gol que llegó con una jugada mixta frente a la portería de Vancouver; Montaño devolvió atrás desde la izquierda, Tyson Whal centró y Mauro Rosales aprovechó un mal rechazo de cabeza y con calidad venció al portero Cannon.

Schmid sentó a Rosales casi inmediatamente después, al minuto 82, ingresando al sueco Friberg, el argentino dejó el terreno ovacionado por los hinchas.

Cuatro minutos después Osvaldo Alonso, que había buscado un gol de media distancia todo el año, recibió un balón unos siete metros fuera del área, lo acomodó con un pié y remató abajo con el otro, para causar la euforia del 2-1, Sounders ganaba frente a su público.

Pero la alegría duró menos de dos minutos, un despeje simple de Hurtado en el área de Sounders se le pasó a Alonso y le quedó al francés Hassli por derecha y botando, el goleador blanco empalmo un derechazo espectacular que se cruzó por encima de Keller y se enterró en la parte alta del otros costado de la portería silenciando esa zona del estadio. Golazo.

El juego terminó en medio de la euforia del palpitante final y tras cuatro minutos de reposición, dándole 1 punto a cada equipo.

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